Candidato favorito a presidencia israelí se retira por sospecha de corrupción

  • Benjamín Ben Eliezer, uno de los dos candidatos favoritos a ocupar la presidencia israelí, anunció hoy su retirada de la campaña tras las sospechas de corrupción que ayer condujeron a un interrogatorio por la policía bajo apercibimiento.

Jerusalén, 7 jun.- Benjamín Ben Eliezer, uno de los dos candidatos favoritos a ocupar la presidencia israelí, anunció hoy su retirada de la campaña tras las sospechas de corrupción que ayer condujeron a un interrogatorio por la policía bajo apercibimiento.

Ben Eliezer, diputado laborista de una larga trayectoria en cinco gobiernos israelíes, ha decidido retirar su candidatura a sólo tres días de la elección en el Parlamento, informa la edición electrónica del diario "Yediot Aharonot".

"No he violado la ley", aseguró el candidato de 78 años en una nota que envió a ése y otros medios locales, en la que lanza la acusación de haber sido objeto de un "asesinato político".

"He luchado toda mi vida y seguiré luchando hasta que la verdad salga a la luz", asegura Ben Eliezer, interrogado el viernes por el presunto delito de haber recibido regalos por cientos de miles de shékels de un multimillonario hasta ahora desconocido para el gran público israelí.

La policía sospecha que con ese y otros dineros recibidos de forma improcedente el político, que llegó a ser viceprimer ministro, financió su apartamento privado en un lujoso complejo de la localidad de Yafo, en el sur de Tel Aviv.

Ben Eliezer se queja de que las sospechas hayan surgido tan sólo cuatro días antes de la elección del jefe de Estado, el próximo 10 de junio, y de que la policía lo citara el viernes a interrogatorio con una alerta de "tan sólo veinte minutos".

La presidencia israelí, ocupada desde hace siete años por el nonagenario Simón Peres, no tiene atribuciones ejecutivas, por lo que sus funciones son meramente representativas y protocolarias.

A las elecciones de este mes concurrían seis candidatos, de ellos cuatros políticos, un científico galardonado en 2011 con el premio Nobel de química y una ex presidenta del Tribunal Supremo.

Ben Eliezer era, junto con el ex presidente del Parlamento Rubi Rivlin, uno de los dos candidatos favoritos, ya que por su origen iraquí contaba con apoyos entre los israelíes de origen askenazí y sefardí, así como con los votos de muchos de los diputados árabes y ultraortodoxos.

Su pasado como general -fue el primer gobernador militar israelí de Cisjordania y Gaza- lo convertía asimismo en un candidato propicio para muchos derechistas, sobre todo después de que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, le negara su apoyo al nacionalista Rivlin por razones personales.

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