Carme Chacón, la delfín catalana

Se mantiene como ministra de Defensa

Carme Chacón entró de lleno en la política nacional de la mano de un joven y desconocido José Luis Rodríguez Zapatero, cuando éste sorprendió y venció a los grandes barones socialistas en el congreso del PSOE de 2000.

Esto ha marcado la trayectoria de la joven política catalana (39 años) en su aterrizaje en la villa y corte. Primero como diputada nacional y con responsabilidad en la Ejecutiva Federal del PSOE, hasta que los socialistas ganaron las elecciones en 2004, cuando fue nombrada vicepresidenta primera del Congreso.

El salto definitivo lo dio en la segunda legislatura de Zapatero, cuando el presidente rompió las quinielas al nombrar ministra de Defensa. Chacón se convertía así en la primera mujer en dirigir esta cartera. Además, este hito fue recordado porque la ministra estaba embarazada de siete meses en el momento de su nombramiento.

Pese a estar ligada a Zapatero, con el que siempre ha reconocido que tiene una gran relación, ella se considera "la niña de Felipe", como se autodenominó durante la campaña de las últimas elecciones generales.

Sus apariciones públicas son muy estudiadas. Siempre a la sombra de su marido, Miguel Barroso, ex responsable de Comunicación en Moncloa, quien siempre está detrás de todos su movimientos, estudiados como estrategias de comunicación para impulsar su carrera.

De hecho, siempre se ha mantenido como uno de los miembros mejor valorados del Gobierno junto a Alfredo Pérez Rubalcaba (en el último barómetro del CIS, publicado en agosto, consiguió la segunda mejor nota, un 4,23).

Uno de sus momentos más polémicos al frente de Defensa fue la retira de las tropas españolas de Kosovo, después de que la declaración de independencia que España no ha reconocido. El anuncio de Chacón levantó una oleada de críticas internacionales y la ministra tuvo que matizar su comunicado.

Otro de los graves problemas a los que ha tenido que enfrentarse ha sido la sustitución de los blindados españoles en Afganistán, tras la muerte de militares españoles desplegados en ese país por la falta de seguridad de los vehículos. Este verano se ha completado la sustitución de todos los vehículos blindados.

Desde entonces, y tras un invierno agitado en las aguas de Somalia, con la presencia de la flota española para defender a los atuneros españoles, Chacón se ha mantenido discreta, sólo tomando protagonismo en las crisis de Haití, donde fallecieron cuatro militares españoles desplegados en ayuda humanitaria.