Casi ocho de cada diez jóvenes viven con sus padres en España

    • Los colectivos que más han visto truncados sus proyectos de emancipación en el último año han sido las personas de entre 16 y 24 años y los hombres.
    • La sobrecualificación, el trabajo a tiempo parcial y las limitaciones para acceder al mercado laboral constituyen las principales barreras que encuentran los jóvenes para emanciparse.

El 77,7% de los españoles menores de 30 años viven con sus padres, según los datos del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (CJE) correspondientes al primer trimestre de 2014, que hace un seguimiento periódico de las condiciones sociolaborales y los procesos de transición a la vida adulta de la población joven, centrando su análisis en el empleo y la vivienda.

El estudio muestra que solo el 22,3% de los jóvenes han logrado establecerse en una vivienda independiente a la de sus progenitores, mientras que el 25,5% de las personas de 30 a 34 años sigue residiendo todavía con sus padres. La tasa ha aumentado un 1,4% con respecto a los datos del cuarto trimestre de 2014.

Los colectivos que más han visto truncados sus proyectos de emancipación en el último año han sido las personas de entre 16 y 24 años y los hombres. Sólo viven fuera del hogar el 7,2% de los de 16 a 24 años y el 17,5% de los hombres menores de 30 años.

La independencia pocas veces se efectúa en solitario. Tres de cada diez de los hogares constituidos por personas de menos de 30 años son unipersonales. A medida que se avanza en edad esta tasa es aún inferior, del 23,1% para los de entre 30 y 34 años.

Pese a la bajada de precios de compra y alquiler en el último año, con la capacidad adquisitiva de la población de menos de 30 años ocupada y de los hogares de personas de 16 a 29 años, sigue sin ser viable económicamente comprar o alquilar una vivienda.

La sobrecualificación, el trabajo a tiempo parcial y las limitaciones para acceder al mercado laboral constituyen las principales barreras que se encuentra este colectivo para emanciparse.Los jóvenes deberían ganar un 105% más de lo que cobran para independizarse

Además, la capacidad adquisitiva de los menores de 30 años ocupados hace que continúe sin ser viable para los jóvenes comprar o alquilar una vivienda. Los jóvenes deberían ganar un 105,14% más de lo que cobran para acceder a una de ellas.

Una persona asalariada de menos de 30 años debería dedicar el 61,5% de su sueldo a la compra de vivienda y el 52,1% en el caso de alquilarla. Ambas cifras superiores al nivel de endeudamiento tolerado (30%). De este modo, sólo el 10% de los jóvenes de 16 a 34 años podría acceder al alquiler de una vivienda sin padecer este riesgo.

En el primer trimestre de 2014, se observa que el salario medio de una persona de menos de 30 años ocupada se ha mantenido estable en el último año y es de 11.858,44 euros anuales. Sin embargo, los ingresos medios de un hogar compuesto por menores de 30 años son de 19.020,89 euros, un 1,67% menos que en el primer trimestre de 2013.

Los jóvenes que más ingresan son los de País Vasco y Madrid con 33.514 y 40.688 euros anuales respectivamente, frente a los extremeños y aragoneses. En estas dos comunidades la cifra apenas supera los 14.000 euros.La tasa de desempleo de los menores de 25 años se sitúa en el 55,5%

El trabajo refleja que la tasa de paro de las personas menores de 25 años alcanza el 55,5%, al tiempo que revela que el 38,8% de las personas ocupadas de menos de 30 años lleva más de tres años trabajando en la empresa actual.

Por otra parte, el estudio muestra que en el primer trimestre de 2014 la tasa de temporalidad ha aumentado del 46,6% del mismo periodo del año anterior, al 49,6%, a la vez que indica que la ocupación a tiempo parcial también ha ido ganando terreno en el último año, hasta alcanzar el 28,1% de los jóvenes empleados con este tipo de contratos. El 28,1% de los menores de 30 años con empleo tienen jornadas a tiempo parcial. Las personas de 16 a 24 años y las mujeres jóvenes son los colectivos que más están sufriendo esta ocupación.

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Es por ello que un 23,3% de los menores de 30 años con empleo estaría dispuesto a trabajar más horas de las que efectivamente realiza.

La sobrecualificación también se ha convertido en una característica de la población joven asalariada, ya que según el trabajo, el 54,9% está realizando un trabajo que requiere un nivel inferior de cualificación al que tiene. Esta sobrecualificación es mayor entre las mujeres jóvenes con un 60%.

Con estos datos sobre la mesa, el presidente del Consejo de la Juventud de España, Héctor Saz, denunció que "la realidad que vive gran parte de la población joven en nuestro país es poco halagüeña en cuanto a sus opciones para abandonar el hogar familiar", y aseguró que "emanciparse es una utopía".

A juicio de Saz, la exclusión del mercado laboral y la precariedad de los empleos a los que acceden los jóvenes son las principales causas de la imposibilidad de emancipación, por lo que aprovechó para hacer un llamamiento al Ejecutivo de Mariano Rajoy para que "invierta y ponga en marcha una reforma laboral que garantice derechos, calidad y condiciones dignas para el empleo de las personas jóvenes".

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