Santo Domingo, 4 nov.- Centenares de dominicanos se manifestaron hoy ante la tumba de los fundadores del país en apoyo a una sentencia del Tribunal Constitucional cuyo punto más controvertido es el que niega la nacionalidad a los hijos de indocumentados y regula la presencia de extranjeros.
La convocatoria, a cargo del movimiento "Defiende tu patria", fue animada por dirigentes políticos, comunicadores, juristas y escritores que consideran la medida como "justa" y en consonancia con la Constitución dominicana.
"Muerte a los traidores", "No negociaremos la soberanía" y "Ellos allá, y nosotros acá", fueron algunas de las consignas repetidas una y otra vez por los asistentes al acto celebrado en el Altar de la Patria, donde descansan los restos de los héroes nacionales Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez y Matías Ramón Mella, ideólogos y ejecutores de la independencia.
La comunicadora Consuelo Despradel denunció que un muro que construyen autoridades haitianas en la línea fronteriza, junto a la provincia dominicana de Elías Piña (oeste), ha tomado territorio local y acusó al senador de esa demarcación de no hacer nada para impedirlo.
Afirmó que en Bánica, un pequeño municipio de esa provincia, el 90 por ciento de las parturientas son haitianas indocumentadas.
Despradel exigió de las autoridades dominicanas "tomarse la palabra" a los haitianos y continuar construyendo el muro para definir "de una vez y por todas" los límites de la frontera entre ambas naciones.
Al encuentro se presentó un grupo de jóvenes que caminó desde la provincia San Juan de la Maguana (suroeste) para denunciar que en los campos de allí "casi todos los trabajos agrícolas" están en manos de los haitianos indocumentados.
Otro de los oradores fue el jurista y exjuez Juan Miguel Castillo Pantaleón, quien defendió la sentencia del Tribunal Constitucional, y expresó que la misma está "profundamente apegada" a los principios de la Carta Magna local, y rechazó que en sus revisiones anteriores se haya establecido que los nacidos en territorio nacional, de padres indocumentados, obtenían la nacionalidad dominicana.
El punto central de la manifestación fue la develación de una escultura en madera que representa una mano con el pulgar hacia arriba y que, de acuerdo a los organizadores, será entregada el miércoles próximo a los miembros del Tribunal Constitucional.
Los responsables del encuentro solicitaron a los dominicanos, especialmente a los jóvenes, defender la soberanía, "porque si no lo hacen, en poco tiempo no habrá patria".
La sentencia del Tribunal Constitucional dominicano ha supuesto una controversia nacional con repercusiones internacionales, debido a la ofensiva diplomática que sostienen República Dominicana y Haití, defendiendo y rechazando la medida.
De acuerdo a cifras oficiales, en República Dominicana residen casi 500.000 haitianos y sus descendientes, buena parte de los cuales son indocumentados.
El Tribunal Constitucional estableció que quienes se encuentren en esa situación deberán ser dotados de una documentación provisional que les confiera la categoría de residentes.
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