Ciudadanos propone mesas de negociación para evitar el colapso

Ciudadanos quiere ser el mediador de un gobierno con PP y PSOE. Un Ejecutivo de transición, considera Albert Rivera, que aborde un calendario conjunto de reformas urgentes.

El presidente de Ciudadanos, que se lo ha trasladado así este lunes a Felipe VI, en su segundo encuentro en Zarzuela, considera que es tiempo de abandonar el inmovilismo de las últimas semanas y sentarse a negociar con los principales partidos. "Queremos que España tenga una nueva etapa", ha urgido en rueda de prensa.

El líder naranja ha sido bronco con los partidos mayoritarios, a quienes ha reprochado estar anclados en "tacticismos" de intereses personales de sus candidatos. "Le hemos trasladado al Rey que no consideramos que exista un vacío legal o Constitucional, existe un vacío de sentido común, de sentido de Estado", ha reprochado Rivera, quien ha instado a Sánchez y a Rajoy a "dejar de deshojar la margarita" para sentarse a negociar cuanto antes.

"Tendremos que decidir si vamos a un fracaso colectivo, que es no tener gobierno, o al éxito colectivo que es que, al margen de gobierno, España tenga una hoja de reformas", ha insistido. Según el dirigente, los líderes de PP y PSOE tendrán que afrontar un "intento de negociación" o bien "asumir que no quieren gobernar".

La intención de Ciudadanos es poner en marcha esta misma semanauna, o varias mesas de negociación, en las que estén sentados los representantes de los partidos mayoritarios. La formación no ha determinado aún si esas mesas serán conjuntas o separadas, aunque tendrán un hilo común, poner en marcha un amplio programa de reformas y su calendario.

"Somos conscientes de que nos toca hacer un papel difícil, nos toca poner en común cosas con el PP y PSOE", ha asumido el líder naranja. Rivera ve posible poner en claro un "espacio común" entre los tres partidos, que, considera tras comparar los programas, tienen puntos esenciales de coincidencia: el concepto de Estado y el marco europeo, la urgencia de regeneración democrática o la puesta en marcha un plan de choque contra la desigualdad y reactivación económica.

Rivera no ha entrado a profundizar si le agradaría más un diálogo con un PP que no estuviese liderado por Rajoy. Su partido no pide en público la cabeza del presidente en funciones, aunque en sus afirmaciones conduce a un urgente relevo de liderazgos. "Rajoy no puede abanderar la luchacontra la corrupción porque no ha sido capaz de limpiar su casa. El PP tiene que decidir si se sube a esta segunda Transición, si participa en este gobierno, si quiere cambiar el rumbo o quiere seguir en la misma posición", ha considerado.Rechazo a Podemos

El líder de Ciudadanos ha descartado que Podemos forme parte de ese marco negociador que piensa poner en marcha. Con el partido emergente, ha dicho rotundo, no comparte prácticamente nada. "Una cosa es que no haya cordones sanitarios y otra que te veas en un pacto de gobierno con partidos que defiendan la ruptura de España", ha aclarado. En eso, ha dicho, resultan "incompatibles".

No obstante, Rivera no descarta acuerdos puntuales de legislatura. "Vaticino que en leyes podemos estar de acuerdo", ha apostillado. Leyes, por ejemplo, como la electoral, que ambas formaciones están de acuerdo en reformar, o las medidas para la regeneración política y la lucha contra la desigualdad. "Una cosa son acuerdos puntuales y otra, ser socios de Gobierno", ha insistido.

Ciudadanos se mantiene en su negativa a apoyar un gobierno en el que esté Podemos. Votará "no" ante un hipotético acuerdo entre PSOE y el partido de Iglesias. La postura compromete la posible estrategia de Pedro Sánchez, que se vería obligado de esta forma a buscar el voto positivo de Rivera y la abstención del partido "morado". Esa es la fórmula que le exigen sus barones autonómicos, Susana Díaz al frente, pero también la que se antoja más complicada. La única salida parece ser, hoy por hoy, la del gobierno de concentración, que los socialistas rechazan.