Colóm: "Intento integrar a todo el mundo en la nueva FAPAE, también a Campoy"

Madrid, 22 jul.- Ramón Colóm, presidente de los productores españoles (FAPAE), ha asegurado hoy en una entrevista con Efe que en los meses que lleva al frente de la organización ha intentado "integrar a todo el mundo"; por eso pide que "nadie ponga problemas a otros: los quiero a todos aquí, no únicamente a los de Madrid".

Colóm respondía así a la polémica desatada tras hacerse pública una misiva en la que el expresidente de la confederación Eduardo Campoy le atacaba duramente.

La carta, según ha indicado Campoy a Efe era "solo la contestación" a otra emitida por Colóm después de la última Junta Directiva, una circular interna en la que el presidente explicaba los motivos de la remodelación interna y su postura, entre otras cosas, acerca de las negociaciones con la Administración.

Campoy decidió dejar por escrito su censura al modo en que estaba gestionando FAPAE, además de acusar al actual presidente de prepotente, inoperante e incapaz y de haber cometido "serios" errores en la reorganización de la federación, entre ellos, que "se asignara un sueldo" mientras despedía a tres personas:

Fabia Buenaventura, directora general; Efrén Chao, director financiero; y María José Vadillo, directora de relaciones internacionales.

"Mi obligación es aglutinar a todos, incluido Eduardo", ha explicado Colóm, quien señala que Campoy "cree que hay que hacer las cosas como se hacían antes, pero yo tengo que dar respuesta a la industria de hoy".

Tras precisar que Campoy "no representa a nadie", puntualiza que "tiene voz, no voto, y es libre de pensar lo que quiera", aunque, en su opinión, "hay cosas que pueden pensarse pero no deben decirse, y menos por escrito".

"Quizá algunas cosas se han hecho mal -reconoce el presidente de FAPAE, elegido en sustitución de Pedro Pérez en diciembre pasado-, pero porque no había otra alternativa que hacerlas como las he hecho".

Campoy, que ha pedido a Colóm "que rectifique o se vaya", ha insistido en que el análisis de la situación "es solo suyo".

No obstante, según ambos han confirmado a Efe, mantendrán una reunión propiciada por la intermediación de "una persona amiga".

Colóm explica: "Hay un trabajo que estamos haciendo y que puede ser mal comprendido. Me presenté con la voluntad de ampliar las pautas que Pedro Pérez marcó en la trayectoria de FAPAE, y quizá esas pautas no gustan a todos, pero aún hay productores que no están asociados y solo seremos fuertes si somos muchos y tenemos una voz potente".

"Por eso pido a todo el mundo que no ponga problemas a otros productores; los quiero a todos aquí, y digo todos, no únicamente a los de Madrid", apunta.

Aunque Colóm no ha querido "personalizar", sí ha respondido a alguna de las acusaciones de Campoy, como el hecho de que cobre un sueldo, cosa que no hacían sus antecesores.

Dedicarse a tiempo completo a FAPAE le ha costado perder otros empleos y le ha obligado a cambiar de domicilio, indica Colóm; en cualquier caso, dice, su sueldo es de 40.000 euros, y no de 60.000, como le achaca Campoy, si bien añade, sin precisar, que "tiene gracia" la acusación porque "otros empleados de FAPAE han cobrado hasta tres veces eso".

Entiende Colom que "el momento no es propicio por cuestiones económicas" y que a él le ha tocado despedir a tres personas: "la Junta me dio el mandato de atajar el déficit y así lo hice".

"Hemos conseguido cosas a nivel interno y estoy contento de los cambios en la estructura básica; con la Administración tenemos el mismo problema que el resto del país, la falta de fondos, lo cual no justifica la situación actual y yo solo intento ser conciliador", resume.

"Soy de los que piensan que si cinco se quedan fuera es un problema", agrega Colóm, y en cuanto a los comentarios sobre intenciones políticas que vierte Campoy, el presidente detalla que "votaré a quien quiera, como él, pero si tengo que besar los pies de Montoro para conseguir lo que necesitan los productores, lo haré, con toda la dignidad, pero lo haré".

Para algunos productores consultados por Efe, existen en estos momentos problemas "bastante más grandes" y que estos temas, en cualquier caso, deberían zanjarse en la intimidad de la organización.