Pekín, 30 oct.- El Congreso Mundial Uigur pide cautela sobre las sospechas de que personas de esa etnia están implicadas en el incidente del lunes en Tiananmen, en el que hubo 5 muertos y 38 heridos, además de expresar su temor a una "mayor represión".
En un comunicado divulgado hoy, la organización uigur en el exilio pide que se "tomen las alegaciones de las autoridades chinas con escepticismo" dada la "ausencia de evidencias independientes y verificables" y muestra el temor a que el incidente aumente la represión de las autoridades.
El lunes, un vehículo todoterreno invadió la avenida Changan, una de las principales de Pekín, y arrolló a varios turistas y policías a su paso, antes de incendiarse a las puertas de la Ciudad Prohibida, bajo el famoso retrato de Mao Zedong.
Horas después, la Policía comenzó la búsqueda de al menos ocho personas que sospecha que están relacionadas con el incidente, la mayoría de etnia uigur y procedentes de Xinjiang, región del noroeste de China y religión musulmana en la que se han registrado numerosos enfrentamientos con la etnia han, la mayoritaria en China.
En julio de 2009, un choque entre uigures y chinos han causó más de 200 muertos en la capital regional, Urumqi.
"El Gobierno chino no dudará en inventar una versión del incidente en Pekín para imponer una mayor represión al pueblo uigur", dijo la presidenta del Congreso, Rebiya Kadeer, en la nota, al destacar que "usaron la guerra contra el terror para justificar duras medidas contra los uigures en el Turkestán Oriental".
Las autoridades chinas atribuyen el suceso y otros ocurridos en la zona a grupos terroristas que buscan la creación de un "Turkestán Oriental" independiente en Xinjiang.
Los uigures aseguran que el intento del Gobierno chino de ligarles con movimientos terroristas ha provocado una fuerte discriminación y temen que ahora, con el incidente de Tiananmen, se incremente.
El Gobierno "tiene el deber de proteger a los derechos humanos de todos sus ciudadanos, incluidos los uigures", se añade en la nota.
"Temo por el futuro del Turkestán Oriental y el pueblo uigur más que nunca", indica la líder del movimiento uigur, quien traslada su "enorme pesar" por las muertes ocurridas en el incidente y rechaza "la violencia en todas sus formas".
Según la asociación, con sede en Washington, la fuerte censura en internet, la detención de periodistas extranjeros que trataron de cubrir lo ocurrido o el silencio oficial indica que el público nunca sabrá la realidad de lo ocurrido el lunes.
No obstante, señaló que la falta de información es una "norma" cuando se trata de algún incidente en el que se ven envueltos uigures, como en junio pasado en Xinjiang, cuando un enfrentamiento entre uigures y las autoridades causó 24 muertos y 23 heridos.
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