De la Vega, la voz del Gobierno sin carné del PSOE

  • Tiene sobre sus espaldas una larga trayectoria en diferentes gobiernos socialistas pese a no estar afiliada a este partido. De hecho, se convirtió en la cara del gobierno de paridad de Zapatero. Su firmeza le ha hecho granjearse una fama de vicepresidenta dura con sus compañeros de Ejecutivo.
Caricatura de María Teresa Fernández De la Vega
Caricatura de María Teresa Fernández De la Vega
Raúl Arias
C. Ibáñez

Abandona la Vicepresidencia Primera, la Portavocía y el Ministerio de Presidencia. Será sustituida en los dos primeros cargos por Rubalcaba y en el último por Ramón Jáuregui

María Teresa Fernández de la Vega es el ejemplo de que sin estar afiliado a un partido político se pueden defender las ideas y el proyecto de gobierno de uno de ellos. Siempre ha defendido su carné de independiente, pese a ostentar uno de los cargos con mayor responsabilidad en el Gobierno: su cara y su voz, y tener sobre sus espaladas una larga lista de cargos en los diferentes ejecutivos socialistas.

Fue la primera mujer en ocupar la vicepresidencia de un Gobierno español, cargo que ha ocupado de la mano de Zapatero en todos sus ejecutivos. Crisis tras crisis de gobierno, De la Vega se ha mantenido en su cargo, pese a los rumores contra ella. Aunque en los dos últimos años de esta legislatura sí que ha perdido el completo protagonismo como portavoz de todos los temas que sí que consiguió en los primeros cuatro años.

Lejos quedan los primeros traspiés, cuando el hito feminista que consiguió la 'vice' quedó eclipsado por el reportaje, muy criticado, que las ocho primeras ministras de Zapatero hicieron para la revista Vogue.

Jaén, Segovia, Madrid y Valencia. Estas cuatro provincias han sido claves en su trayectoria política, pues se ha presentado por estas circunscripciones en cuatro elecciones diferentes, lo que demuestra su capacidad de acoplarse a las necesidades de un partido al que no esta afiliada.

En las últimas elecciones generales, Zapatero aprovechó sus raíces valencianas (nació en la capital del Turia) para intentar rascar votos en uno de los feudos del PP. Fue toda una declaración de intenciones: mandar a uno de sus pesos pesados a hacer campaña en casa del rival.

Y la vicepresidenta cumplió. La campaña fue reñida con denuncias entre los candidatos, pero no consiguió su objetivo y el PP volvió a ganar en Valencia. Quizá ésta sea de una de sus espinitas políticas.

Esta juez de profesión, que llegó a ser vocal del Consejo General del Poder Judicial, ha pasado por prácticamente todos los gobiernos socialistas en España: desde jefa de Gabinete del Ministerio de Justicia en 1982 hasta ocupar la Vicepresidencia en 2004.

Siempre que esta responsabilidad se lo permita, a la 'vice' le gusta mucho caminar, sobre todo dar paseos por el campo, aunque parte de su tiempo libre también se lo dedica a la lectura.

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