Berlín, 11 feb.- Varias decenas de manifestantes realizaron hoy un acto de protesta contra el presidente alemán, Christian Wulff, al que pusieron una silla gigantesca en frente del palacio de Bellevue para pedir así la dimisión del mandatario.
"Ponerle a alguien la silla en la calle" en alemán significa echar a alguien de algún lugar.
Los organizadores del acto esperaban reunir a 500 manifestantes pero, según la policía, los asistentes no llegaron ni siquiera al centenar.
Wulff está bajo presión desde hace semanas por sus relaciones demasiado estrechas con empresarios en su época de primer ministro del estado federado de Baja Sajonia.
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