Oviedo.- La Policía Nacional ha desarticulado un grupo organizado responsable de al menos treinta y tres robos con fuerza en domicilios de ejecutivos chinos en una operación dirigida desde Asturias que se ha saldado con seis detenidos en la Comunidad Valenciana y otros dos en Barcelona, todos ellos argelinos.
Los policías ha recuperado 50.000 euros en efectivo, setenta y cinco piezas de joyería y veintitrés relojes, entre otros efectos.
De los arrestados seis residían en la Comunidad Valenciana (entre ellos un matrimonio y sus dos hijos) y dos en Barcelona, pero se desplazaban por toda España para cometer los asaltos.
Por el momento se les imputa treinta y tres robos en domicilios de ciudadanos chinos que ocupan cargos ejecutivos en sus empresas, cifra que podría ser ampliada.
Se les considera responsables de once robos en Asturias (seis en Oviedo, tres en Avilés y dos en Gijón) y de otros en Madrid, A Coruña, Santiago de Compostela, Vigo, Orense, León, Burgos, Aranda de Duero, Córdoba, Granada, Zaragoza, Calatayud, Segorbe y Vall de Uxó.
El grupo IV de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Asturias, bajo la dirección del juez de Instrucción número 1 de Oviedo, Javier Luengo, ha desarrollado una compleja investigación en colaboración con brigadas de Valencia y Barcelona.
Los integrantes del grupo desarticulado seleccionaban previamente a sus víctimas entre ciudadanos chinos con un alto estatus dentro de sus empresas y con unos ingresos económicos importantes, y su objetivo principal era obtener dinero en efectivo y joyas.
Una vez que fijaban el objetivo, lo sometían a una meticulosa vigilancia para conocer su domicilio, a las personas con las que pudiera residir, sus usos y sus movimientos habituales.
Cuando el grupo contaba con la información aprovechaba los momentos en los que no hubiera nadie en la vivienda de la víctima para entrar en ella y apoderarse de los efectos de valor, especialmente dinero en metálico y joyas.
La mayoría del género sustraído lo enviaban a Argelia para darle "salida".
Los métodos que utilizaban para franquear la puerta de los domicilios variaban en función de la dificultad y las medidas de seguridad.
Comenzaban por la técnica del "resbalón", introduciendo un plástico duro entre el marco y la puerta y si no lo conseguían usaban una palanqueta o la fracturaban.
El grupo se desplazaba por toda España para elegir a sus víctimas y para examinar sus hábitos se alojaban en la localidad de destino durante unos días hasta cometer los robos.
Posteriormente regresaban a la Comunidad Valenciana para preparar un nuevo golpe y viajar a otra zona.
Los investigadores descubrieron que el grupo tenía previstos más asaltos en el sur de España, por lo que decidieron intervenir para evitar la comisión de nuevos delitos.
En el registro de los domicilios de los detenidos fueron intervenidos un vehículo de alta gama, cerca de 50.000 euros, unos 5.000 yuans (moneda china), 75 piezas de joyería, 23 relojes, una caja fuerte "reventada" proveniente del robo de un domicilio en Granada, dos mazas y dispositivos electrónicos e informáticos como cámaras de fotos, terminales de telefonía móvil, ordenadores portátiles, reproductores de música y cámaras de vídeo, entre otros efectos.
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