Doña Elena comprueba el éxito del centro de educación especial que inauguró hace 25 años

Madrid.- La infanta Elena ha visitado hoy el colegio público de educación especial bautizado con su nombre que ella misma inauguró hace 25 años en el distrito madrileño de Ciudad Lineal y que se ha convertido ya en un experimentado centro de referencia para la atención educativa de alumnos con discapacidad motora.

Acompañada por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y la consejera regional de Educación, Lucía Figar, doña Elena ha recorrido con detenimiento las diferentes aulas e instalaciones de este centro, en las que ha intercambiado impresiones con los especialistas del equipo educativo y sanitario.

Durante la visita, la directora del colegio, Soledad Ortega, ha explicado el resultado cotidiano de la puesta en práctica en el colegio de tres iniciativas innovadoras: la estimulación basal para atender a alumnos con necesidad de apoyo en todos los ámbitos, el "Proyecto Martita" para niños con dificultades de comunicación y el Programa de Transición a la Vida Adulta.

El Colegio "Infanta Elena" es un centro específico de educación especial, dependiente de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, en el que estudian 63 alumnos, de los que un 60 por ciento presenta discapacidad motora, un 20 por ciento discapacidad psíquica y otro 20 por ciento trastornos generalizados del desarrollo.

En esta escuela, pionera en el tratamiento de niños con discapacidad motora y en la que han estudiado desde 1986 más de 350 alumnos, trabajan cuatro fisioterapeutas, dos profesionales de enfermería y trece técnicos educativos especialistas en pedagogía terapéutica, audición y lenguaje.

En su recorrido por el centro, doña Elena ha visitado las aulas de Infantil, Transición a la Vida Adulta y Educación Básica Obligatoria -clase en la que ha comprobado cómo una niña identificaba sonidos con imágenes en una pizarra táctil-, para conocer a continuación la aplicación práctica de las técnicas de estimulación.

Mediante la estimulación basal, los profesionales que trabajan en el centro ayudan a los niños a desarrollar su percepción corporal para que establezcan vínculos personales, a orientarse en el espacio y a captar la voz de otras personas por las vibraciones acústicas.

Tras ser informada en el gimnasio de fisioterapia sobre los tratamientos individuales que allí se proporcionan a los niños con parálisis cerebral y antes de descubrir una placa conmemorativa de la visita, doña Elena ha asistido en el salón de actos a una representación teatral titulada "El pez arcoiris", un canto a la amistad y el afán de superación interpretado por alumnos del centro.