La portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, se ha encarado este martes con virulencia a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en plena sesión de control.
Durante la ronda de preguntas al Ejecutivo, Rodríguez ha acusado al exministro de Agricultura y candidato del PP a las elecciones europeas, Miguel Arias Cañete, de haber firmado un contrato de con el Cabildo de Tenerife a través de una de sus empresas, Petrologis Canarias. Para ello, ha exhibido una copia del Boletín Oficial de la provincia de Las Palmas, que recogía un contrato concedido en septiembre de 2011 por un importe de 41.000 euros, cuando el exministro aún era diputado.
La portavoz también ha recordado que, según los apuntes del extesorero del PP, la propia Sáenz de Santamaría cobrase 600.000 euros en 'B', a lo que ésta ha respondido después de la sesión con un tajante "en mi puta vida he cobrado un sobre".
Rodríguez ha mostrado al hemiciclo el documento mientras se sucedían los gritos de protesta y las interpelaciones directas. Ante la ausencia de Arias Cañete en la bancada del Gobierno, la portavoz ha acusado al candidato de mentir y de "huir" de la sesión para "no explicar las relaciones que tenían sus empresas con las Administraciones públicas".
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"A Cañete se le ha permitido ser un lobbysta privilegiado que de vez en cuando se pasaba por el Consejo de Ministros", ha sostenido Rodríguez, que ha sacado a colación que el exministro de Agricultura cobrase 300.000 euros en sobresueldos según los 'papeles' de Bárcenas.
La vicepresidenta, que no ha respondido a la acusación, ha contraatacado en un clima de alta tensión. Sáenz de Santamaría ha reprochado a Rodríguez que, tras el fin del último gobierno Zapatero, ésta cobrase "cesantías" mientras era portavoz de la oposición; y tildado a los portavoces del Ejecutivo socialista de "indecentes", "mentirosos", "cicateros", "francotiradores de la política" e "insumisos del Estado de Derecho".
Dejando de lado la acusación a Cañete, la vicepresidenta se ha centrado en exaltar su labor de gobierno que, en su opinión, no había generado interés hasta ahora porque "era un buen ministro". En este sentido, ha reprochado que el PSOE tenga "mala memoria" respecto a sus reformas y recordado que ha sido el PP el que ha adjudicado 47.000 millones de euros a los agricultores españoles a través de la PAC, subido la renta agraria un 9% y aprobado unos planes hidrológicos que no salieron adelante en 2009.
El enfrentamiento ha llegado a tal nivel que el presidente del Congreso, Jesús Posada, ha tenido que poner orden en el hemiciclo mientras que la vicepresidenta permanecía de pie y de brazos cruzados ante el micrófono con gesto resignado, esperando a que los gritos cesasen. "Resérvense la algarabía para sus mitines. Al menos se verá que tienen algo que ofrecer", ha zanjado.
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