Washington.- El Gobierno de Estados Unidos seguirá conversando con China para convencerle de la necesidad de que se una a sus esfuerzos en pro de una nueva tanda sanciones contra Irán, después de que Pekín defendiera el miércoles la vía diplomática.
Así lo dijo hoy la secretaria de Estado, Hillary Clinton, que ha iniciado una intensa actividad para tratar de convencer a sus socios en el Grupo 5+1 -China, EE.UU., Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania- de la necesidad de imponer nuevas sanciones a Irán, más centradas en la elite dirigente.
El ministro chino de Asuntos Exteriores, Yang Jiechi, dijo esta semana que "lo urgente es continuar con el diálogo y las negociaciones diplomáticas" con Irán, rechazando así la intención de EE.UU. y de otros países de imponer más sanciones a ese país por su negativa a suspender su programa de enriquecimiento de uranio.
Irán "no ha cerrado la puerta del diálogo" con la comunidad internacional en el contencioso sobre su programa nuclear, afirmó hoy el jefe de la diplomacia china en Munich, donde asiste a la Conferencia de Seguridad.
Clinton recordó que la comunidad internacional siempre ha perseguido un proceso de doble vía -uno diplomático y otro de sanciones- pero el Gobierno de EE.UU. considera que en este momento se debe recurrir a la presión.
Es "importante que avancemos en evaluar qué presión, qué sanciones pueden ser impuestas a los iraníes", señaló.
Por ello, dijo, "seguiremos conversando con todos nuestros socios, incluido China, en el marco de este esfuerzo", afirmó.
EE.UU. ha dicho que el Grupo 5+1 está actualmente intercambiando ideas sobre la posibilidad de una nueva serie de sanciones a Irán.
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