"Estados Unidos condena firmemente el atentado terrorista contra funcionarios militares turcos y civiles hoy en Ankara", indicó en un comunicado Mark Toner, portavoz del departamento de Estado.
El ataque con coche bomba tuvo como blanco un convoy de vehículos del ejército que se encontraba en las cercanías de la sede del estado mayor del ejército turco y del Parlamento.
"Ofrecemos nuestras condolencias a las familias de quienes murieron y a los heridos les deseamos una pronta recuperación. Reafirmamos nuestra alianza con Turquía, nuestro aliado en el seno de la Otan, para combatir las amenazas terroristas que compartimos", añadió.
Turquía vive en estado de alerta permanente desde el verano boreal pasado, cuando empezó una serie de atentados que el gobierno atribuye al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El atentado de este miércoles aún no ha sido reivindicado.
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