José Luis Valladolid no va a dimitir de su cargo como alcalde de Villares del Saz, después de haber llamado "puta barata podemita" a la portavoz del PSOE de Castilla La Mancha, Cristina Maestre.
La práctica totalidad de los partidos con representación política le han exigido que asuma sus responsabilidades políticas, incluídos destacados representantes de su partido, pero él no cree que deba hacerlo: "Yo estoy siempre a disposición de mi partido, pero los únicos que tienen potestad para pedir mi dimisión son quienes me han votado con una mayoría aplastante. Dudo que haya muchos políticos que hayan obtenido un respaldo tan grande como el que me dieron a mí en mi pueblo", ha declarado en una entrevista con Antena 3.
De los 368 votos emitidos en las elecciones del pasado 24 de mayo en Villares del Saz, 247 respaldaron la candidatura del PP que encabezaba José Luis Valladolid, lo que representa el 68,04%, que reportó 5 concejales, mientras que el PSOE obtuvo sólo, 106, el 29,2% y 2 concejales.La cabeza de Cospedal
"Reitero que me arrepiento por los insultos, que se debieron a un error, a un momento de ofuscación, pero si rastrean los comentarios en internet hay gente que pide la cabeza de Cospedal. No pide su dimisión, sino su cabeza".
Interrogado si eso quería decir que la ofuscación que motivó sus comentarios se debía a la defensa de su propio partido, el alcalde responde afirmativamente: "Exacto".
Valladolid se siente ofendido por lo están diciendo sobre él y cree que no se merece las críticas porque está "trabajando desinteresadamente por su pueblo y por su país".
Ante las voces que reclaman su dimisión como muestra de la dignificación de la política, el alcalde responde que cuando los ciudadanos votaron hace unos meses no se estaban juzgando un error que pudiera cometer un alcalde, sino toda la gestión durante cuatro años. "Mi error es intolerable, pero no se debe llevar un comentario personal mío a la gestión municipal", sentencia. Tras reiterar sus disculpas a la portavoz socialista ofendida, declaró que si le daban su número de teléfono estaba dispuesto a llamarla personalmente o a enviarle un mensaje para pedirle perdón: "No voy a justificar mi comentario". El pasado domingo, insistió en que con aquel polémico comentario realmente no quería insultar.
El alcalde de Villares del Saz, que se encontraba de viaje en el momento en que Antena 3TV contactó con él, asegura sentir un enorme respaldo de sus vecinos, que han inundado su teléfono de mensajes de apoyo: "Mis paisanos me dicen que ni se me ocurra dimitir", para concluir que se define como "una persona que apechuga y asume su responsabilidad".
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