El congreso sólo ha utilizado este año la mitad de los jueves habilitados para plenos

El Congreso de los Diputados ha empleado únicamente seis de los 12 jueves de este año que en principio estaban habilitados para la celebración de plenos, al finiquitarse el miércoles el orden del día previsto para esa semana.
Según pudo comprobar Servimedia, la aplicación de la propuesta del presidente de la Cámara Baja, José Bono, de "ensayar" en lo que queda de período de sesiones la supresión de la jornada del jueves tendría una incidencia limitada.
Por un lado, los plenos abarcan una exigua parcela de la agenda de los diputados, pues apenas han ocupado 31 de los 160 días transcurridos de 2011, menos de la quinta parte del total. Por otro, los jueves se han utilizado la mitad de las semanas en que estaban en principio contemplados.
Así, en el mes de febrero no hizo falta recurrir al jueves en los plenos de la segunda y la tercera semana (la primera de cada mes nunca se utiliza el Hemiciclo), y sólo el jueves 24 se reunió para debatir y votar el plan de choque de medidas para el empleo aprobado por el Gobierno.
A su vez, en marzo se celebraron sesiones el jueves 10, para tratar la reforma de las políticas activas de empleo, y el 31, en que se inició la tramitación de la aplicación de la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. En cambio, el 17 y el 24 el Hemiciclo permaneció vacío. En abril, la única semana habilitada para plenos tampoco tuvo que recurrir al jueves 14.
El único mes que ha empleado todos los jueves disponibles fue mayo, cuando el día 5 se debatió la Ley de Derechos y Deberes de los Militares, el 12 la del Juego y el 26 se rechazaron las enmiendas a la reforma de las pensiones. La semana del 19 no había Pleno convocado debido a la inminencia de las elecciones autonómicas y municipales del día 22.
Hoy, jueves 9, que sería el primero de junio en que podría haberse prolongado el Pleno del martes y el miércoles, tampoco ha hecho falta recurrir a él. La idea que Bono sugirió ayer llega, por tanto, en una semana propicia para poner de manifiesto que los jueves suelen ser superfluos en el Hemiciclo.