Nairobi, 12 dic.- El depuesto presidente de Madagascar Marc Ravalomanana no concurrirá a las elecciones previstas para mayo de 2013, a petición de la Comunidad para el Desarrollo del África Meridional (SADC, por sus siglas en inglés), para facilitar la estabilización del país, dijo en declaraciones publicadas hoy por la prensa tanzana.
"Lo que quiero es volver a Madagascar para continuar, de forma pacífica, con mi trabajo y ayudar a reconstruir el país que amo junto a mis compatriotas", señaló Ravalomanana, quien vive en el exilio en Sudáfrica desde su derrocamiento en 2009.
El anuncio llega tras la reunión extraordinaria del pasado fin de semana de la SADC en la capital económica de Tanzania, Dar es Salaam.
El presidente anfitrión, Jakaya Kikwete, agregó que, "como parte de la solución de los actuales problemas en Madagascar, (el mandatario malgache, Andry) Rajoelina y Ravalomanana no deberían presentarse a las próximas elecciones" presidenciales del próximo 8 de mayo.
"Esto debería reducir, si no zanjar, la animosidad, amargura y tensiones en la atmósfera política de ese país", apuntó Kikwete, también presidente de la troika de la SADC para la Paz, Defensa y Seguridad.
Por su parte, Ravalomanana indicó que su deseo "es ver la recuperación del país", al que ha sido vetado desde su derrocamiento, en 2009.
"Necesito volver a Madagascar -afirmó-. Tengo familia allí. No he visto a mi hijo desde que me forzaron al exilio en 2009".
Kikwete esperó que el actual Gobierno de Madagascar acepte las condiciones de la SADC y autorice el tantas veces denegado regreso de Ravalomanana.
Ravalomanana fue derrocado en 2009 tras un golpe de Estado respaldado por el Ejército, que colocó en el poder a Andry Rajoelina, un antiguo pinchadiscos reconvertido en político.
La SADC estableció una hoja de ruta en noviembre del año pasado, que preveía la celebración de elecciones en 2012, con un Gobierno de Transición dirigido por Rajoelina.
Ravalomanana ha sido condenado a cadena perpetua en Madagascar por la muerte de 30 manifestantes de la oposición asesinados por la Guardia Presidencial en febrero de 2009, antes del golpe de Estado, cargos que él considera infundados.
El mandatario depuesto, exiliado en Sudáfrica, ha tratado de regresar en varias ocasiones a la isla, pero no ha logrado aterrizar debido a las amenazas de detención y el riesgo de enfrentamientos entre partidarios de ambas facciones.
Desde el golpe de Estado, el régimen de Rajoelina está sometido al ostracismo internacional y suspendido dentro de la Unión Africana y la SADC mientras no se restablezca el orden constitucional.
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