El Ejército paquistaní empieza despliegue para las elecciones de 11 de mayo

  • Unidades del Ejército paquistaní empezaron hoy a desplegarse en la convulsa provincia suroccidental de Baluchistán para garantizar la seguridad durante las elecciones generales y provinciales del próximo 11 de mayo, informaron a Efe diversas fuentes.

Islamabad, 29 abr.- Unidades del Ejército paquistaní empezaron hoy a desplegarse en la convulsa provincia suroccidental de Baluchistán para garantizar la seguridad durante las elecciones generales y provinciales del próximo 11 de mayo, informaron a Efe diversas fuentes.

Los militares han empezado a tomar posiciones en la ciudad de Mastung -una de las localidades más golpeadas por la violencia sectaria en los últimos meses-, donde se harán cargo de la seguridad en los alrededores de algunos zonas.

"Se encargarán de al menos 24 colegios electorales en puntos especialmente sensibles", según un responsable policial local de Mastung, Abdul Fatah.

Miembros de la minoría chií, especialmente afectada por el marcado incremento de la violencia sectaria en el país, se felicitaron por el despliegue del Ejército, que ha sido reivindicado en diversas ocasiones ante la falta de eficacia policial.

A pesar de las demandas de que los militares se ocuparan de la seguridad en zonas de Baluchistán, especialmente tras dos masacres que a principios de año costaron la vida de unos 200 chiíes en Quetta, las Fuerzas Armadas no habían actuado hasta ahora.

"Es una buena noticia y sabemos que se van a desplegar en al menos otras 16 ciudades, incluida la capital provincial, Quetta", afirmó Qadir Alí, representante del Partido Democrático Hazara, formación que representa a parte de esa minoría religiosa.

Otro portavoz de esa comunidad, el exsenador Fasieh Iqbal, añadió que la Comisión Electoral será la responsable de escoger qué puntos de esas 16 ciudades ocupará el Ejército, "pero seguro que habrá algunas áreas de Quetta", considerada un feudo de los extremistas.

El progresivo incremento de la violencia contra algunas formaciones electorales, especialmente en Baluchistán y en la vecina provincia de Khyber Pakhtunkwa, ha llevado a las autoridades a iniciar un fuerte despliegue de fuerzas de seguridad.

El ministro regional de Interior de Baluchistán, Akbar Durrani, anunció ayer que además de 6.500 soldados, se movilizarán unos 60.000 miembros de diversos cuerpos policiales y paramilitares para garantizar que las elecciones se desarrollan sin incidentes.

La situación de inseguridad reinante en esa provincia ha provocado que la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea rehúse desplegar a sus equipos allí, como sí ha hecho en las otras tres provincias del país.

Baluchistán fue la zona de Pakistán más golpeada por el terrorismo el año pasado, ya que se registraron 474 incidentes y 631 muertos, tantos como en el cinturón tribal, situado más al norte y donde, sin embargo, hubo menor cantidad de ataques.

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