El Gobierno propone un pacto para dotar a la Defensa de financiación estable

Madrid, 6 oct.- El secretario de Estado de Defensa, Pedro Argüelles, ha propuesto hoy a todas las fuerzas políticas consenso para dotar a las Fuerzas Armadas de un marco de financiación más estable y alejado de los "vaivenes políticos diarios" y que dé a las empresas y a los ejércitos capacidad de planeamiento a largo plazo.

Así lo ha asegurado Argüelles ante la Comisión de Defensa del Congreso donde ha dado cuenta de los presupuestos del departamento para el año que viene, que contarán con 5.767 millones de euros, lo que supone un incremento del 0,38 por ciento con respecto a 2014.

Según Argüelles, se trata de una "muy leve subida" con la que, sin embargo, se inicia un cambio de tendencia y un "nuevo ciclo inversor" tras la reducción acumulada del presupuesto del departamento en un 32 por ciento desde 2008.

Ha incidido en que este repunte se explica no sólo por la mejora de general de la economía, sino también por los objetivos marcados por la OTAN en la cumbre de Cardiff, que fijan una inversión en defensa en el 2 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 10 años, frente al 0,9 por ciento actual de España.

Sin citar en ningún momento al líder del PSOE, Pedro Sánchez, que ha apostado por reforzar el gasto social frente al de Defensa, Argüelles ha insistido en que el presupuesto para las FFAA debería contar con una "garantía de continuidad" y una financiación "estable" y "resguardada de la coyuntura económica y partidista".

Como novedades para el próximo ejercicio, Defensa destinará 78 millones de euros en dos programas concretos de armamento: 41 millones para los nuevos vehículos blindados de ruedas 8x8 y otros 37 millones para las fragatas F100.

Sólo el Ministerio de Industria incorporará 564 millones de euros para programas de armamento, un 64 por ciento más que en 2014.

De este modo se da respuesta -ha subrayado- a las necesidades de las Fuerzas Armadas y se garantiza la supervivencia de la industria nacional de Defensa, pieza clave para mantener "nuestra soberanía" y la independencia operativa de los ejércitos.

Previamente en un encuentro informativo, el secretario de Estado destacó la necesidad del Ejército del Aire de adquirir aviones de abastecimiento en vuelo en sustitución de los Boeing 707 cuya vida útil finalizará en 2016.

Ha reconocido que hay "poco tiempo" para buscar una solución y no perder la "capacidad estratégica" y ha dicho que ya se han iniciado conversaciones con Airbus para la compra de algunas unidades del A330-MRTT, recortando su pedido del avión de transporte A440M.

Argüelles ha defendido la fórmula del crédito extraordinario para financiar el déficit de los programas de armamento, crédito que se conocerá a finales de año y que se situará entre los 800 y los 900 millones de euros, una cantidad similar a la de 2014.

Una fórmula presupuestaria que ha sido criticada por la oposición, que ha pedido que esos gastos se incluyan en los presupuestos y no después a través de un crédito extraordinario.

Desde el PSOE, Víctor Morlán no entiende que el Gobierno no contemple este importante gasto en los presupuestos y se ha preguntado si es porque el Ejecutivo no se atreve a que los ciudadanos conozcan el gasto real en Defensa.

"Es una desfachatez", ha denunciado el diputado de IU Álvaro Sanz, mientras que UPyD ha pedido el apoyo del resto de grupos políticos para poder presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional por estos créditos que, a su juicio, se usan para "dificultar" el control parlamentario y "engañar" sobre el gasto real de los ejércitos.

Críticas que no comprende Pedro Argüelles, que no observa ningún problema legal en estos créditos extraordinarios que, en su opinión, siempre son mejor "que no pagar".

El secretario de Estado ha recordado que esa fórmula presupuestaria tiene el aval del Consejo de Estado y se vota además en el Congreso.

En esta misma línea, el portavoz de Defensa del PP, Vicente Ferrer, ha negado que esos créditos extraordinarios se aprueben en una "covachuela" del Ministerio de Defensa, como parece sugerir la oposición.

Ferrer ha mostrado además su preocupación por la propuesta de Pedro Sánchez de reducir el presupuesto en Defensa porque, a su juicio, traslada la impresión de que hay un gasto "desbocado" cuando está muy por debajo del resto de países europeos.