El Gobierno quiere negociar con los grupos y las CCAA el plan anticorrupción

Madrid, 11 oct.- La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha ratificado hoy el compromiso del Ejecutivo de negociar con los grupos parlamentarios y con las comunidades autónomas las medidas incluidas en el plan de regeneración democrática y de lucha contra la corrupción.

De hecho, Sáenz de Santamaría ha explicado que, tras la aprobación hace unas semanas por parte del Consejo de Ministros del referido plan, cuyas medidas deben desarrollarse en respectivos proyectos legislativos, ella misma se puso en contacto con los portavoces parlamentarios y ya han comenzado las conversaciones con CiU, PNV y UPyD.

Por parte del PSOE, están a la espera de que el principal partido de la oposición les confirme si quiere participar en el proceso y, en caso afirmativo, designe a la persona encargada de ese diálogo. "Estaríamos encantados de hacerlo", ha afirmado la vicepresidenta.

Si además las comunidades autónomas quieren participar en el proceso, "bienvenidas", ha dicho, y ha explicado que el Gobierno abrirá un cauce de audiencia pública a todas las autonomías cuando los anteproyectos sean llevados al Consejo de Ministros para que puedan dar su opinión.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, la vicepresidenta ha celebrado la disposición de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, quien ha pedido al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, que lidere un plan de regeneración y que se ha ofrecido a colaborar en esta materia.

Según Sáenz de Santamaría, el Gobierno cree "muy positiva" la reunión de ayer entre Rajoy y Díaz, consciente de la importancia de trabajar "juntos" contra la corrupción.

"Bienvenidas todas aquellas instituciones que estén dispuestas y consideren oportuno ese plan de lucha contra la corrupción y de regeneración democrática que el Gobierno viene poniendo en marcha desde hace meses", ha añadido.

Ha recordado que el plan incluye medidas que afectan al régimen económico y financiero de los partidos o los deberes y obligaciones de los cargos públicos y a determinadas medidas de naturaleza penal y procesal, entre otros puntos.

A su entender, ates de presentar los proyectos legislativos sería "bueno" que se pudieran discutir cuestiones que pueden plantear otros grupos para enriquecer "lo que tiene que ser un pacto".

También ha sostenido que el Gobierno está abierto "al máximo debate parlamentario" cuando se tramiten esos proyectos y a la posibilidad de que los grupos o las comunidades puedan enriquecerlo con sus aportaciones.

En su opinión, la corrupción es "un problema de todos" y todos deben trabajar para combatirla y en favor de una mayor transparencia y una mayor claridad en el ejercicio de las funciones de cada uno.

Respecto a la ley de transparencia, ha querido tranquilizar a Susana Díaz sobre su efecto en las competencias autonómicas y ha indicado que el Gobierno y el PP ya llegaron a un acuerdo con algunos grupos del Congreso, como CiU y PNV, para que no fuera así.

A partir de la normativa básica que se establece en esa ley, ha detallado, las autonomías pueden aprobar sus propias normas.

Preguntada sobre si espera un cambio en la postura del PSOE en la ley de transparencia tras el encuentro de Rajoy y Díaz, Sáenz de Santamaría ha declinado opinar, si bien ha insistido en que al Gobierno le gustaría "hablar con todos".