El presidente de aume sale esta noche de su arresto

El presidente de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), Jorge Bravo, saldrá esta medianoche del arresto de un mes y un día que ha cumplido en el Centro Disciplinario Centro, instalado en la base de San Pedro, en la carretera de Colmenar Viejo a Miraflores de la Sierra.
Bravo, a quien esperarán a la salida del centro un grupo de familiares, simpatizantes y asociados de AUME, fue condenado por reclamar en un medio de comunicación que los recortes presupuestarios en Defensa se apliquen a actos y festejos militares superfluos en lugar de a las condiciones laborales de su personal.
La condena suscitó numerosas protestas entre las asociaciones militares y algunos partidos políticos, como IU, que se hicieron eco de ellas. En primer lugar, el que la dictara el general de división José Manuel Roldán, jefe de los Sistemas de Información, Telecomunicaciones y Asistencia Técnica del Ejército de Tierra, cuya competencia para ello consideraban dudosa.
También por el hecho de que a Bravo se le privara del uso del teléfono móvil y el acceso a Internet, entre otras comodidades, lo que motivó que AUME instara a la defensora del Pueblo a visitar el centro para comprobar sus condiciones.
Pero, sobre todo, la condena al presidente de AUME ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre los límites a la libertad de expresión de los portavoces de las asociaciones militares reconocidas como tales en el Registro habilitado por el Ministerio de Defensa.
La Ley de Derechos y Deberes de los Militares establece para los militares el único límite de la "la salvaguarda de la seguridad y defensa nacional, el deber de reserva y el respeto a la dignidad de las personas y de las instituciones y poderes públicos", pero el Régimen Disciplinario mantiene el respeto a la cadena de mando y sus cauces de resolución de problemas, lo que dejaría virtualmente sin sentido el asociacionismo.
AUME y las otras dos asociaciones con representación en el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas, la de Suboficiales (Asfaspro) y la de Militares de Tropa y Marinería (AMTM), se han unido para pedir una asamblea extraordinaria del Consejo para discutir este tema.
Dicha reunión tendrá lugar, finalmente, el próximo lunes, 6 de mayo, en el Ministerio de Defensa, por lo que la liberación de Bravo le permitirá asistir a la misma.