El psoe acusa al gobierno de querer inaugurar "la era de la castidad"

La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, acusó este miércoles al Gobierno de Mariano Rajoy de "estar contra las mujeres", al querer "inaugurar una nueva era: la de la castidad del siglo XXI", por sacar de la financiación pública una serie de anticonceptivos orales de tercera generación.
El Partido Socialista hizo estas consideraciones tras conocerse que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad dejará de financiar un grupo de presentaciones de anticonceptivos orales a partir del próximo 1 de agosto.
"Si no tenemos fácil acceso a los anticonceptivos, si no tenemos educación sexual para nuestras adolescentes y si no tenemos capacidad de decidir sobre el aborto, ¿de qué está hablando este Gobierno?", se preguntó Valenciano, quien se respondió, a renglón seguido, que "tal vez van a inaugurar una nueva era, que es la de la castidad del siglo XXI".
"De lo que si estoy segura es de que esto es ideología ultraconservadora pura y dura, y de que si fueran los hombres los que dieran la vida, todo sería distinto", prosiguió Valenciano.
Recordó que la ley del aborto vigente, que aprobó el anterior gobierno del PSOE, recogía la inclusión en el sistema de estos anticonceptivos, precisamente porque "era una estrategia de salud sexual y reproductiva".
Sobre las posibles acciones contra esta decisión del Gobierno que podría llevar a cabo el PSOE, Valenciano confirmó que los socialistas pedirán explicaciones a la ministra de Sanidad, Ana Mato, e iniciarán "una ofensiva parlamentaria para tratar de parar esta nueva barbaridad".
En la misma línea que Valenciano se pronunciaron también la secretaria de Igualdad del PSOE, Purificación Causapié, y la responsable de Política Social del mismo partido, Trinidad Jiménez, que acusaron al Ejecutivo de Rajoy de "condenar" a las mujeres al retroceso permanente "con sus políticas ultraconservadoras"
La medida es "intolerable" para Causapié, mientras que para Jiménez supone un "nuevo recorte social" que trata de hacerse, además, "por la puerta de atrás y a escondidas".
Con esta iniciativa, advirtieron los socialistas, el Gobierno está contraviniendo el mandato de la disposición adicional tercera de la Ley Orgánica de Salud Sexual e Interrupción Voluntaria del Embarazo, que impulsa y garantiza expresamente la inclusión de anticonceptivos de última generación a la actual oferta de anticonceptivos financiados.