Naciones Unidas.- El rápido deterioro de la situación humanitaria en Costa de Marfil tiene en alerta a Naciones Unidas, cuyos responsables mostraron hoy su "seria preocupación" ante la escalada de la violencia que ha vivido el país africano y que ha tenido a la población civil como víctimas.
Así lo expresó la subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, quien pidió a "las partes que usan la violencia" que respeten "a los civiles, incluidos a los trabajadores humanitarios", y que permitan "el acceso rápido y seguro de las organizaciones humanitarias" al país.
Amos aseguró en un comunicado que, desde que se anunciaron los resultados de las elecciones presidenciales a principios de diciembre, "la situación humanitaria ha empeorado dramáticamente en el país y ha mostrado un deterioro acusado en el último mes".
Según los datos divulgados por la subsecretaria general, más de 460 personas han sido asesinadas y muchas más han resultado heridas, entre las que se incluye a mujeres y niños; mientras que se estima en medio millón de personas las desplazadas dentro del país y más de 90.000 las que lo han abandonado.
"La escalada de violencia y el uso de armamento pesado, especialmente en zonas urbanas, está provocando cada vez un mayor número de muertos entre los civiles", explicó Amos, quien también se mostró preocupada ante "el cada vez mayor acoso que sufren los inmigrantes de otras partes del África occidental en el país".
A esa situación se suman "el continuo acoso y los obstáculos planteados a los trabajadores de organizaciones no gubernamentales y de Naciones Unidas, la entrada ilegal en las instalaciones humanitarias del organismo y el robo de material de las agencias de ayuda", según Amos.
Ese cúmulo de factores, según la subsecretaria, ponen "en serio peligro la capacidad de los trabajadores humanitarios de llegar a las personas que necesitan ayuda".
"Hemos asignado 10,4 millones de dólares al Fondo Central de Respuesta a Emergencias de la ONU (CERF) y debemos ser capaces de usarlos y proveer la ayuda que tan desesperadamente se necesita en el país", indicó Amos.
La subsecretaria general de la ONU para Asuntos Humanitarios aseguró también que es "inaceptable" que se destruyan "propiedades civiles, como los establecimientos que son el sustento de muchas personas".
La Comunidad Económica de Estados del África Occidental (CEDEAO) pidió hoy a la ONU más capacidad de maniobra para tratar de solucionar cuanto antes la crisis surgida en Costa de Marfil tras los comicios presidenciales del pasado noviembre.
En la sesión de clausura de su trigésima novena sesión, la CEDEAO solicitó a la ONU, mediante una resolución, una autorización que le permita desarrollar las medidas adoptadas el pasado diciembre respecto a Costa de Marfil, entre las que se incluiría el uso de la fuerza militar.
Esta petición supone que los líderes asistentes a la cumbre están dispuestos a hacer lo necesario para traspasar el poder que ostenta el presidente marfileño, Laurent Gbagbo, a Alassane Ouattara, reconocido por la comunidad internacional como vencedor de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del pasado 28 de noviembre.
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