El secretario de Justicia de Puerto Rico presenta su dimisión tras escándalo

San Juan, 11 dic.- El secretario de Justicia de Puerto Rico, Luis Sánchez Betances, renunció hoy a su cargo tras el escándalo generado por visitar un cuartel policial donde un exsocio y amigo suyo permanecía detenido por conducir ebrio, señaló el propio funcionario.

De hecho, poco después de que el propio Sánchez Betances anunciara su dimisión en un comunicado y acudiera a La Fortaleza a dar explicaciones en persona, el gobernador ofreció una conferencia de prensa en la que agradeció su "gesto", porque "su actuación impide que esto haga daño al Gobierno".

Este "gesto" pone fin a la tormenta desatada después de que el funcionario se personara en el cuartel policial de la División de Tránsito de San Juan el pasado viernes en respuesta a la llamada de su exsocio Jaime Sifre Rodríguez, arrestado por conducir haciendo uso del celular y con un porcentaje de 0,215 de alcohol en sangre.

García Padilla aceptó la dimisión de Sánchez Betances, efectiva a a partir del próximo 31 de diciembre, pese a que reiteró que es una persona y un profesional "de reputación intachable" y defendió su actuación durante su polémica visita al cuartel.

"Puerto Rico pierde un gran servidor público", subrayó García Padilla, para quien la querella presentada contra Sánchez Betances por parte de líderes y legisladores del opositor Partido Nuevo Progresista (PNP) por la posible violación del Código de Ética Gubernamental carece de sentido.

Subrayó que Sánchez Betances no se identificó en la comisaría como secretario de Justicia y defendió que, pese a tratarse de una conducta "imprudente", no cometió delito alguno.

Los puertorriqueños esperaban el resultado de la reunión anunciada entre el gobernador y Sánchez Betances a petición del primero a causa de una polémica que ha estado en portada de los medios locales desde hace días y que amenazaba con salpicar al Ejecutivo.

García Padilla había dejado claro desde el primer momento que pese a tratarse de una conducta poco prudente por lo que significa la mera presencia de un secretario de Justicia en una comisaría para interesarse por un amigo, éste "nunca trató de entorpecer los procedimientos legales".

La conducta de Sánchez Betances fue cuestionada incluso por miembros de sus propio partido, como la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín, que hoy defendió que el funcionario debía pagar con su dimisión el error cometido, aunque insistió en que no ponía en duda su honestidad.

El propio Sánchez Betances, que estaba a punto de cumplir un año en el cargo, dijo desde el primer momento que nunca intentó mediar para que su amigo no fuera procesado judicialmente.

"Mirando en retrospectiva los eventos ocurridos el pasado viernes, acepto que cometí un error al presentarme al lugar de los hechos bajo las circunstancias que acontecieron esa noche", declaró anoche, nada más aterrizar en San Juan procedente de Costa Rica, donde realizaba un viaje oficial que tuvo que interrumpir precipitadamente a causa de esta polémica.