El Solitario niega un atraco y dice que testigos vieron un personaje utópico

  • Jaime Giménez Arbe, conocido como el Solitario, ha negado hoy que atracase un banco en Alcobendas (Madrid) en 2006 y ha asegurado que los testigos no han podido reconocerle a él sino "a un personaje utópico", en un juicio en el que le piden once años de prisión y que ha quedado visto para sentencia.

Madrid, 9 abr.- Jaime Giménez Arbe, conocido como el Solitario, ha negado hoy que atracase un banco en Alcobendas (Madrid) en 2006 y ha asegurado que los testigos no han podido reconocerle a él sino "a un personaje utópico", en un juicio en el que le piden once años de prisión y que ha quedado visto para sentencia.

El Juzgado de lo Penal número 17 de Madrid ha celebrado el juicio contra el Solitario por un supuesto atraco a mano armada en una sucursal bancaria de La Moraleja, Alcobendas, el 10 de mayo de 2006 y por el que se enfrenta a los delitos de robo con intimidación, uso de instrumento peligroso, tenencia ilícita de armas y falsedad documental.

Tras escuchar veinticuatro testimonios, la Fiscalía ha mantenido su petición de once años de prisión para el procesado, al igual que la acusación particular, mientras que su defensa ha pedido la absolución porque las pruebas no son concluyentes.

Giménez Arbe ha hecho uso de la última palabra antes de que el juicio quedara visto para sentencia para asegurar que las pruebas recabadas no son concluyentes y los testigos no pudieron reconocerle a él, sino "a un personaje utópico, conocido como el Solitario", ya que él no perpetró ese robo.

Durante su intervención ha mantenido un leve rifirrafe con la juez, que le ha pedido que se ciñera a hacer uso de la última palabra y le ha exigido respeto, por lo que el acusado ha llegado a decir que se sentía "como en la época de Franco".

Al inicio del juicio "El Solitario" se ha caído al suelo y ha tenido que ser reconocido por un médico porque decía que estaba mareado y no podía contestar a las preguntas de las partes, pero la juez le ha reprendido por "simular" estar enfermo, cuando se encuentra "en buen estado de salud" según ha constatado el médico que le ha atendido y un informe de la prisión de Soto del Real.

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