"Vivimos otra vez la aplicación de la receta 'Guerra contra el terror', dijo Mazyek al diario Neue Osnabrücker Zeitung, un día después de que el Parlamento alemán aprobara el despliegue de hasta 1.200 soldados alemanes para combatir al EI en Siria.
"En el pasado, esa receta fracasó y hoy sabemos aún más que la guerra contra el terror no consigue sino reforzar el terror, lo cual significa: tras Al Qaida vino el EI, ¿quién será el siguiente?", se preguntó.
Para Mazyek, la emergencia de esos grupos "es fruto de una política guerrera muy mal dirigida", sobre todo en Irak. "Hemos sembrado la guerra y hemos recogido a los refugiados y el terrorismo", opinó.
El presidente del ZMD, una de las asociaciones que representan a los musulmanes alemanes, sugiere interrumpir las entregas de armas en Oriente Medio, presionar a las potencias regionales para que negocien y proponer un plan de paz y reconciliación para "agostar" las raíces del terrorismo.
El gobierno alemán decidió intervenir en la lucha contra el EI, después de que Francia le pidiera ayuda tras los atentados que causaron 130 muertos en París, el 13 de noviembre.
La adopción de su plan superó todas las etapas necesarias en un tiempo récord, a pesar de las críticas de la oposición.
El ejército desplegará hasta 1.200 soldados, media docena de aviones de reconocimiento Tornado y una fragata para escoltar al portaviones francés Charles de Gaulle.
Alemania no realizará, sin embargo, ningún bombardeo sobre Siria o Irak, a diferencia de Francia, Estados Unidos, Rusia y Reino Unido, que inició el jueves una campaña de ataques aéreos.
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