Esposa del acusado: es tan bueno que es incapaz de hacer nada a nadie

Albacete, 16 nov.- La esposa de F.R.G., el hombre acusado de haber matado a Mari Cielo Cañavate, desaparecida en Hellín (Albacete) hace cuatro años, ha dicho hoy que cree a su marido cuando dice que no lo hizo, porque "es tan bueno que es incapaz de hacer nada a nadie".

En el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Albacete, ha atribuido a "la envidia" la declaración de varios vecinos que aseguran haber visto al acusado en su todoterreno junto a una mujer rubia, de las características de Mari Cielo, la misma mañana de su desaparición.

Y ha considerado que pretendía ayudar a su marido, "porque sabe que es un buen hombre y trabajador", un vecino que declaró haberle visto con la furgoneta la tarde de la desaparición, cuando, ha dicho la esposa, su marido no se movió del taller.

La acusación ha mantenido en el juicio que el imputado pudo coger la furgoneta para deshacerse del cuerpo de Mari Cielo.

Su mujer ha reconocido que habló con ese testigo y con las mujeres de dos testigos que situaban al acusado, acompañado de una mujer, en la rotonda de Pozohondo que va hacia su finca -en la que la familia de Mari Cielo mantiene que enterró el cadáver-.

Pero ha afirmado que lo hizo "sólo para pedirles que dijeran la verdad, que por Dios se acordaran de si le habían visto de verdad ese día y cómo", pero que no para coaccionarlos.

Ha insistido en que, aunque el exmarido de Mari Cielo le dijo que su esposo mantenía una relación con ella, todavía hoy no tiene la certeza de que haya existido esa relación, y ha detallado que la mañana en que desapareció Mari Cielo su marido salió y después volvió para cambiar de coche e ir a Albacete.

Ha señalado que esa misma tarde el acusado le contó que el padre y la hermana de Mari Cielo habían ido al taller para decirle que había desaparecido y que él les dijo que por la mañana había ido a su casa "pero que llamó a la puerta, no le abrió y no la vio".

"No le di mucha importancia", ha añadido la mujer que ha dicho que pensó "pobre chica, igual se ha perdido".

En la sesión de hoy también han declarado dos de los hijos del acusado, que han negado que hubieran amenazado de muerte a Mari Cielo.

La hija ha reconocido que la conoció un día que llevó a su madre a hablar con el exmarido de ella y que estaba la propia Mari Cielo, pero ha negado que ese día la amenazara con matarla.

El hijo ha señalado que no tuvo conocimiento de la relación de su padre y Mari Cielo hasta después de la desaparición.

También ha declarado el exmarido de Mari Cielo, que ha dicho que nunca vio a Mari Cielo "desanimada" con la relación que mantenía con el acusado y que ella era "una buena madre".

Una amiga de la desaparecida que presenció el encuentro entre ésta, su exmarido y la mujer y la hija del acusado, ha reconocido que Mari Cielo y la hija estuvieron discutiendo.

Otra vecina amiga de Mari Cielo ha declarado que un mes antes de su desaparición ella le contó que había dejado al acusado porque no se decidía a dejar a su mujer y que él la llamaba mucho "pero ya no quería saber nada de la relación".

La de hoy ha sido la séptima sesión del juicio con jurado popular que se sigue en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Albacete y que está previsto que concluya el próximo martes.