Feijóo sale en defensa de las autonomías, que no son una "frivolidad pasajera"

Santiago de Compostela.- El presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha salido hoy en defensa del Estado de las autonomías, que no son "una frivolidad pasajera", y ha hecho un llamamiento a la unidad para solucionar los problemas de Galicia y para que los ciudadanos recuperen la confianza en la política.

Al comienzo de su discurso en el debate de política general en el Parlamento gallego, el jefe del Ejecutivo comenzó con un homenaje a los precursores de la autonomía de Galicia, que en mes y medio cumple treinta años, entre los que citó al primer presidente electo, Gerardo Fernández Albor.

Núñez Feijóo hizo una reflexión sobre la difícil situación actual ante la crisis económica y el problema añadido de que la sociedad "está perdiendo la fe en las instituciones" e incluso se comienza a instalar el debate sobre la idoneidad del modelo de Estado.

"Los máximos culpables de que los ciudadanos perciban a los políticos como un problema somos nosotros mismos", apuntó el presidente gallego, que también indicó que una "triple amenaza gravita sobre el modelo de que formamos parte".

De un lado, dijo, es la posición de quienes sienten "nostalgia de esquemas más centralizados, con la excusa de que serían más difíciles para contrarrestar la crisis económica", postura en la que militan quienes ven los mecanismos de la autonomía como un "obstáculo" o "un lujo que solamente sería aceptable en momentos históricos de bonanza", dijo.

Núñez Feijóo dijo discrepar de esta postura, porque las autonomías "no son una frivolidad pasajera", sino que en la reivindicación autonómica está el "anhelo de una España equilibrada y solidaria".

También quiso alertar contra la idea de "centrar en la estructura autonómica las causa de la cara española de la crisis, olvidando a quien tiene en sus manos los principales resortes".

El jefe del Ejecutivo indicó que la segunda amenaza sobre el modelo autonómico es la "suplantación subrepticia del Estado autonómico" por otro que se desarrolla "dando tumbos, con medidas en las que el privilegio sustituye a la equidad y la improvisación puede más que la armonía", que afecta a ámbitos como la financiación autonómica o la realidad financiera.

Por el contrario, Feijóo opinó que un buen funcionamiento de la España de las autonomías es "fundamental" para que la crisis no genere más desequilibrios en los territorios y en Galicia ha de servir como "salvaguarda contra los intereses" de quienes quieren "aprovechar la crisis para hacer una relectura sesgada del Estado que define la Constitución".

"Soy galleguista, autonomista y creo que la legitimidad de la autonomía se basa en su capacidad para acercarse al sentir de la gente y, desde esa proximidad, intentar resolver sus problemas", señaló Núñez Feijóo.

En su discurso, también aludió a las dificultades al comienzo de la autonomía, ante lo que apostó por recuperar el espíritu "de aquel primer gran debate parlamentario".

"Se trata de generar una nueva esperanza, que sea común a todos, que sea capaz de unirnos como la esperanza que nos unió a nuestros predecesores, por encima de las diferencias políticas, para crear la autonomía", apuntó el jefe del Ejecutivo gallego.