Fiscalía mexicana ofrece millonarias recompensas para resolver secuestros

México, 27 dic.- La Fiscalía General de México anunció hoy recompensas de hasta 10 millones de pesos (unos 714.000 dólares) a quienes proporcionen informes para resolver los secuestros de trece personas, entre ellas once policías, ocurridos en 2009 y 2010.

Las recompensas se darán "a personas que aporten información útil relacionada con las investigaciones" que sirva para localizar a los rehenes o detener a los responsables de estos hechos, destacó la Procuraduría General de la República (PGR) en tres acuerdos publicados hoy en el Diario Oficial de la Federación.

Esta es la primera vez que la Fiscalía mexicana ofrece recompensas para combatir este delito, que -según expertos- ha ido en aumento en paralelo a la actividad del crimen organizado, en particular el narcotráfico.

La PGR incluyó en sus anuncios el caso del secuestro de siete policías federales que desaparecieron junto a un civil el 16 de noviembre de 2009 en el estado occidental de Michoacán, un crimen del que se sospecha son responsables integrantes del cartel de La Familia.

También se ofrecen recompensas para resolver el secuestro de cuatro agentes adscritos a la Fiscalía del estado norteño de Durango que desaparecieron el 29 de noviembre del 2010.

La oferta de la PGR incluye a quienes aporten datos para localizar a los responsables del secuestro de la estudiante de arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México Adriana Morlett, de 21 años, desaparecida en septiembre de 2010 y cuyo cadáver fue encontrado en noviembre pasado.

Las recompensas van desde los 3 millones de pesos (214.285 dólares) para quienes den información que lleve a la detención de los responsables de estos secuestros, hasta los 10 millones de pesos por quien dé información que permita localizar a los policías federales y los agentes de la fiscalía desaparecidos.

El secuestro forma parte de una serie de delitos atribuidos a grupos del crimen organizado que se han extendido por el país y que en muchos casos tienen vínculos con el narcotráfico.

Grupos civiles calculan que en México este año se cometieron un promedio diario de 45 secuestros, mientras que el año pasado el promedio era de 37. En la mayoría de estos casos se trata de retenciones por horas o pocos días que no transcienden públicamente.

Es una tendencia que va creciendo en los últimos años. La ONG Consejo para la Ley y los Derechos Humanos (CLDH) asegura que en 2007 se registraron 731 secuestros, en 2008 9.855, en 2009 11.680 y el año pasado 13.505.

Los datos oficiales, sin embargo, indican que el número de secuestros es mucho menor. Los cálculos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señalan que sólo uno de cada cuatro secuestros se denuncia.

Este año el Congreso mexicano aprobó una ley que endurece las penas en contra de las bandas de secuestradores con sanciones que van desde 25 a 45 años cuando haya violencia y cuando los delincuentes hayan sido o sean policías, y de 40 hasta 70 años de prisión en caso del asesinato de los rehenes.