Garaikoetxea y Ardanza dicen que tras la paz habrá que hablar del contencioso

  • Los exlehendakaris Carlos Garaikoetxea y José Antonio Ardanza han dicho hoy que una vez que se haya asentado definitivamente la paz en Euskadi se deberá afrontar el debate sobre el "conflicto" o el "contencioso" político vasco.

Vitoria, 27 oct.- Los exlehendakaris Carlos Garaikoetxea y José Antonio Ardanza han dicho hoy que una vez que se haya asentado definitivamente la paz en Euskadi se deberá afrontar el debate sobre el "conflicto" o el "contencioso" político vasco.

Garaikoetxea, Ardanza y Juan José Ibarretxe se han reunido esta tarde con el actual lehendakari, Patxi López, que les ha citado dentro de la ronda de contactos que está manteniendo esta semana para analizar la situación generada tras el anuncio de ETA de cese definitivo de su actividad violenta.

Mientras que Ibarretxe ha declinado hacer declaraciones a los medios de comunicación, sus dos predecesores sí han expuesto las líneas maestras de lo que han sido sus reflexiones con López y han coincidido en que una vez que se consolide la paz se deberá tratar el denominado "conflicto" político vasco, es decir la configuración del marco jurídico político.

Garaikoetxea ha explicado, no obstante, que existen una serie pasos que se deben dar de forma inminente, entre ellas que ETA y su entorno pidan perdón a las víctimas y que se atienda a las personas que han sufrido torturas y abusos policiales.

También ha incluido como urgente el "tratamiento de la cuestión penitenciaria", fundamentalmente para acabar con la dispersión de los presos de ETA que están "sometidos a un agravamiento de sus condenas por algo que ya ha tocado a su fin".

Ha abogado por solucionar la situación de personas como Arnaldo Otegi, encarcelado, ha recordado, por haber "propugnado el cambio en la izquierda abertzale que ha conducido a esta hoja de ruta en virtud de la cual se ha producido el cese de la estrategia militar".

También ha defendido la legalización de Sortu, porque para asentar la situación se necesitan "gestos e iniciativas de todas las partes".

José Antonio Ardanza ha señalado por su parte que le hubiera gustado haber podido gestionar este momento porque cuando él fue lehendakari, entre 1985 y 1999, tuvo que asistir a numerosos funerales de víctimas del terrorismo.

Ha destacado que hay que tener "muy presentes" a las víctimas y se ha dirigido a ETA y a la izquierda abertzale al afirmar que "tendrán que reconocer su propio fracaso" ya que tras "34 años sólo han logrado sufrimiento y poner un montón de palos en las ruedas".

Tras sostener que no tiene que haber "ni vencedores ni vencidos" en este proceso, Ardanza se ha mostrado convencido de que la democracia "resolverá" cuestiones del "pos-ETA", como las relacionadas con los presos o los "exiliados".

Una vez que se hayan cerrado todas estas cuestiones será el "momento de abordar el contencioso que tiene este país desde hace 120 años", sobre el que todos se podrán expresar ya sin temor.

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