Gobierno y PSOE se enrocan en sus posturas y los socialistas votarán que "no"

Madrid, 12 abr.- El Gobierno y el PSOE se mantienen inamovibles en sus posturas respecto a la ley de estabilidad presupuestaria, de manera que los socialistas votarán en contra, al considerar un "paripé" el "amago" de negociación que ha querido hacer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, in extremis.

Durante una media hora se han reunido en las dependencias del Congreso el propio Montoro y el portavoz parlamentario del PP, Alfonso Alonso, con su homóloga socialista, Soraya Rodríguez, y el ex ministro de Trabajo Valeriano Gómez.

Un encuentro que, según fuentes socialistas, ha sido un simple "paripé", porque en realidad el Gobierno del PP no está dispuesto a mover "ni un sola coma" de su proyecto legislativo y lo que ha pretendido era ofrecer una imagen de supuesta negociación "para los telediarios".

Durante el encuentro, los representantes socialistas han puesto sobre la mesa el acuerdo que firmaron el pasado verano el PSOE y el PP, que motivó la reforma de la Constitución y el compromiso de elaborar una ley de estabilidad que recogiera un objetivo de déficit estructural del 0,4 por ciento, y no del cero por ciento.

"Es un trágala", se ha quejado una fuente socialista, que ha insistido en afear al PP que haya convertido "en papel mojado" el pacto del pasado verano, pese a que fue ofrecido en ese momento por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y firmado por la actual vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.

Fuentes del Ejecutivo, por su parte, han insistido en la imposibilidad de introducir ninguna modificación en el proyecto de ley que suponga relajar los objetivos de estabilidad presupuestaria, y menos aún dada la situación actual y el acoso de los mercados financieros a España.

Según estas fuentes, "hay que lanzar un mensaje de que gobierne quien gobierne se va a mantener el compromiso de estabilidad presupuestaria".

El Gobierno sí podrá contar en cambio con los votos a favor de CiU y UPyD, con quien ha pactado algunas enmiendas, y con la abstención del PNV.