González dice que las acusaciones y el ruido mediático refuerzan sus ganas de presentarse a la reelección

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, ha afirmado este martes que el"ruido mediático" de los últimos días refuerza su disposición a encabezar la lista del PP a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.

González ha hecho estas declaraciones preguntado por si se ha sentido respaldado por su partido después de que ayer él afirmara que fue sometido a un "chantaje" por miembros policiales por investigaciones referidas a su casa en Estepona.

"Mi determinación sigue siendo la misma y cada vez mayor frente a este ruido mediático: mi disposición a encabezar esa candidatura si el partido así lo decide", ha afirmado González, quien ha dicho que las circunstancias "no han cambiado" hoy, respecto de ayer y antes de ayer.

"Lo que sí cambia es que hay muchísimo ruido mediático", ha indicado para añadir que ese ruido tiene un "claro objetivo": que se haga "todo lo posible" por que él no encabece la candidatura a la Presidencia de la Comunidad.

El presidente de la Comunidad de Madrid ha afirmado más tarde que la denuncia que el comisario José Villarejo ha presentado contra él es"la reacción" a las explicaciones que él dio ayer, y ha criticado que la gente se centre en"intrigas" y cuestiones "obscenas"como, a su juicio, está sucediendo."No me cabe en la cabeza que nadie pretendiera perjudicarse a sí mismo perjudicando al partido", ha afirmado preguntado además por si considera que estas informaciones salen del PP Nacional. Eso sí, ha instado a que si hay alguien que tiene algún interés en que no sea candidato, "lo manifieste y diga las causas".

González ha hecho estas declaraciones, después de la información del diario 'El Mundo', que afirma que pidió en persona a la Policía que ocultara lo sucedido con su casa de la Costa del Sol, cosa que ayer desmintió en rueda de prensa.

Según el periódico, González mantuvo una reunión secreta con varios mandos policiales a las 11 horas del 29 de noviembre de 2011, tres meses después de que comenzaran las pesquisas de su piso en Estepona, adquirido por un testaferro profesional, a través de una empresa creada sólo unos meses antes y que está domiciliada en un paraíso fiscal.