González dice que se intenta engañar a los ciudadanos con la privatización de los hospitales


El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, dijo que debe abandonarse la “demagogia” en referencia a las recientes manifestaciones sindicales sobre el tema de sanidad en la región y la eventual privatización de sus servicios, y a propósito de las jornadas de huelgas convocadas para este mes y el próximo.

González señaló que se intenta engañar al pueblo al hablarles de la privatización de los hospitales e indicó que su gestión no ha aprobado o aceptará un sistema de salud que afecte los intereses de la ciudadanía.
“Insisto en que estamos en una demagogia que debemos dejar y más en tiempos de crisis”, aseveró el presidente madrileño, quien inauguró la extensión de la escuela bilingüe 'El Cantizal' en Las Rozas.
Sobre este tema, aseguró que para los ciudadanos es irrelevante quién suministre los pagos a los médicos, pues siguen recibiendo el mismo trato en los centros de salud.
El mandatario regional insistió que su gobierno garantizará las atenciones a bajo coste y que si alguien se quiere manifestar en defensa de sus intereses sindicales o particulares, será respetado, más “no hacen ningún servicio a los ciudadanos” y que dicha huelga o protesta tendrá que ser explicada.
El presidente declaró que debido al déficit, se busca encontrar un modelo que permita continuar con una sanidad universal y para esto solicitó la ayuda de los profesionales de salud.
ENCIERRO DE TRABAJADORES
Sobre las manifestaciones que realizan los trabajadores de sanidad en protesta por las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno de Madrid, el presidente de la comunidad dijo que le parece surrealista y que si no están conformes, pueden dimitir.
“Que no trabajen a disgusto. Nadie les obliga”, expresó González, quien admitió desconocer el actual sistema de protesta, al cual se han sumado 19 hospitales, siendo la Fundación Hospital de Alcorcón el más reciente de estos.
Las protestas por los ajustes en el presupuesto para el 2013 y las medidas adoptadas por el Gobierno regional ha suscitado el rechazo de diversos sectores sociales y sindicales.

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