Argel, 13 feb.- La ONG de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) denunció hoy que las autoridades libias no han garantizado a Seif al Islam al Gadafi, hijo del dictador Muamar al Gadafi, ni a otros responsables del antiguo régimen, sus derechos básicos en los procesos judiciales abiertos contra ellos.
"El Gobierno libio debe hacer mayores esfuerzos para garantizar que los antiguos responsables detenidos tengan un asesoramiento legal adecuado y la oportunidad de defenderse de manera justa delante de un juez", aseguró el vicedirector de HRW para Oriente Medio y el Norte de África, Nadim Houry, en un comunicado.
Según la nota, HRW se reunió el pasado 23 de febrero con Seif al Islam en Zintan, la ciudad donde se encuentra detenido, y que está situada a 170 kilómetros al suroeste de Trípoli.
Asimismo mantuvo encuentros con el jefe de los servicios de inteligencia de Gadafi, Abdala al Senusi, y los exprimeros ministros Al Bagdadi al Mahmudi y Abuzaid Dorda en la prisión de Al Hadba, en Trípoli.
La ONG ha indicado que Gadafi y Sanusi aseguraron durante las entrevistas que no tienen abogado, mientras que Dorda y Al Mahmudi han denunciado que no han podido tener un acceso adecuado a su consejero legal.
El comunicado agrega que los cuatro insistieron en que los interrogatorios se hicieron en ausencia de abogados y que no se les garantizó el derecho de permanecer en silencio o conocer la identidad de sus interrogadores.
Asimismo, según el relato de los detenidos, Sanusi, Dorda y Al Mahmudi firmaron confesiones tras varias sesiones de interrogatorio sin que sus interrogadores les permitieran revisar los documentos.
Por su parte, Gadafi aseguró que fue forzado a firmar varias confesiones.
"Bajo estas circunstancias, es difícil imaginar cómo alguno de estos hombres puede tener un juicio legal", aseguró Houry en el comunicado.
Finalmente, el escrito difundido por HRW hace hincapié en que "a pesar de los numerosos retos a los que hace frente el Gobierno libio, debe tratar de suministrar a Gadafi y Sanusi acceso inmediato a un abogado de su elección y a los cuatro acceso confidencial y sin restricciones a sus consejeros legales".
HRW ha solicitado en varios ocasiones la entrega de Gadafi a la Corte Penal Internacional, que reclama al hijo del dictador para juzgarlo por crímenes contra la humanidad, en relación a la represión del levantamiento popular armado que estalló en febrero de 2011 contra el régimen de su padre.
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