Iglesia pide restablecer "orden constitucional alterado" en El Salvador

San Salvador, 22 jul.- La iglesia católica de El Salvador pidió hoy al Parlamento acatar la anulación de las elecciones de magistrados para restablecer "el orden constitucional alterado" y señaló que la toma de posesión "de facto" de esos jueces derivó en que el país tenga dos cortes suprema de justicia.

La Conferencia Episcopal de El Salvador insistió en un comunicado en que la Asamblea Legislativa cumpla las sentencias de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), que el 5 de junio pasado anuló las elecciones de magistrados hechas en 2006 y el 24 de abril, y ordenó celebrarlas de nuevo.

Los obispos hicieron, según el texto, "un llamado urgente a (...) la Asamblea Legislativa para que, en aras del bien común, sea preservada la independencia judicial, restableciendo a la mayor brevedad el orden constitucional alterado, dando cumplimiento íntegro a las sentencias de la Sala de lo Constitucional".

Pidieron elegir "como magistrados a personas que reúnan los requisitos exigidos por la Constitución de la República".

La Conferencia Episcopal aseveró que "la toma de posesión de facto (de hecho) de los señores abogados cuyo nombramiento como magistrados fue declarado inconstitucional no les da posesión de iure (de derecho)".

"Por el contrario", prosiguió, esa acción "agudiza el conflicto, al grado de existir, con apariencia legal, dos cortes plenas y dos presidentes del Órgano Judicial, generando mayor incertidumbre e inseguridad jurídica" en el país.

Los magistrados elegidos en abril tomaron posesión el pasado 1 de julio en medio de una operación policial mientras la sede de la CSJ estaba rodeada de activistas a favor y en contra de ellos.

En similares circunstancias asumió, el día 16, el presidente del tribunal supremo elegido en abril, Ovidio Bonilla, para un período de tres años en sustitución de Belarmino Jaime, también titular de la Sala de lo Constitucional.

En ambos casos, el sindicato de la CSJ se tomó los portones de acceso para "facilitar" el ingreso de los magistrados.

Bonilla ha reconocido que llamó a cerrajeros para que abrieran el salón de sesiones, el despacho de la Presidencia y otras oficinas de la CSJ porque Jaime no le entregó las llaves.

Mientras Bonilla preside la CSJ integrada por los jueces cuya elección se anuló, el magistrado Florentín Meléndez dirige la otra corte, que es la Sala de lo Constitucional ampliada con suplentes.

La Conferencia Episcopal subrayó en su comunicado que "el máximo órgano de justicia está gravemente amenazado por el desorden reinante en su interior, debido a la toma de posesión de los magistrados cuya elección fue declarada inconstitucional".

Diversos sectores han expresado su temor a que las salas del Poder Judicial caigan en la anulación mutua de fallos y esto también afecte el funcionamiento de instancias judiciales inferiores.

El Parlamento desconoció los fallos de inconstitucionalidad y acudió a la Corte Centroamericana de Justicia, que el 21 de junio resolvió suspenderlos en tanto emite una resolución definitiva, decisión que la Sala desechó.

Cinco de los 15 miembros de la Corte Suprema deben ser renovados cada tres años y así cumplen períodos escalonados de nueve años.

La Constitución salvadoreña no fija en qué períodos el Parlamento debe elegir a los magistrados, pero la Sala argumentó que una misma legislatura no puede hacerlo más de un vez, como ocurrió en 2006 y en abril pasado.

El presidente salvadoreño, Mauricio Funes, anunció el sábado que convocará a los seis partidos políticos a un diálogo para buscarle una salida a la crisis.

Dirigentes del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional y de la opositora Alianza Republicana Nacionalista dijeron que apoyan el llamamiento de Funes, según la prensa local.