Vitoria, 8 may.- Las instituciones que forman parte del accionariado del Parque Tecnológico de Álava (PTA) pagarán seis millones de euros menos de lo previsto a Kutxabank en concepto del crédito que deben abonar por una hipoteca que formalizó Epsilon, empresa en fase de liquidación, para la adquisición de un edificio.
El Ejecutivo vasco, que hoy ha tratado este asunto en la reunión de Consejo de Gobierno, ha informado de que se ha cerrado un acuerdo con Kutxabank para pagar 16,3 millones de euros por el crédito del edificio de Epsilon en lugar de los 22,5 millones previstos inicialmente.
La empresa Epsilon, creada para impulsar en Euskadi un proyecto de automovilismo de competición, recibió durante la pasada legislatura vasca 50 millones de euros en ayudas institucionales y además el Parque de Álava se comprometió en 2009 a avalar el crédito que pidió por la compra de un edificio en dicho centro tecnológico.
La empresa entró en situación concursal el pasado mes de septiembre al no poder afrontar los créditos contraídos con Caja Vital y Kutxa, ambas entidades integradas actualmente en Kutxabank.
En estos momentos Epsilon ha iniciado la fase de su liquidación y son los socios del Parque Tecnológico los que tienen que afrontar las deudas.
El Gobierno Vasco, a través de la SPRI, tiene un 64 por ciento de las acciones del parque; la Diputación de Álava, más de un 20 por ciento y el Ayuntamiento de Vitoria en torno a un 10 por ciento.
El Consejo de Gobierno vasco ha acordado modificar los objetivos anuales de la sociedad PTA, de modo que se incluye en su presupuesto de capital una partida de 16,3 millones de euros.
Esta es la cuantía que ha pactado el Ejecutivo vasco y Kutxabank para que el PTA se haga cargo del edificio de Epsilon, seis millones de euros menos de lo previsto.
El PTA, cuando avaló el crédito de Epsilon, se comprometió a hacerse cargo de la hipoteca si el proyecto empresarial fracasaba, como ha ocurrido.
El Gobierno Vasco ha puesto en valor el acuerdo con Kutxabank que permitirá reducir el impacto económico de la operación en las arcas públicas.
Según el Ejecutivo, la financiación de esta compra se basa en un crédito en condiciones "muy favorables" que Kutxabank da al PTA, con una duración de 20 años, incluidos dos años de carencia.
Con este acuerdo se limita la deuda contraída, al impedir su crecimiento por los intereses de demora y determinarse un interés inferior para los importes vencidos.
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