La isla de La Palma pierde el 6,8% de su superficie en el incendio

En la isla de La Palma comienzan a respirar tranquilos, aunque no se confían. Han conseguido estabilizar el incendio pero las llamas continúan consumiendo el bosque que tanto caracteriza a esta isla canaria. Según las estimaciones las llamas han devorad ya cerca de 5.000 hectáreas, lo que supone el 6,8% de la superficie de la isla (70.600 hectáreas). 

Según los datos facilitados por la consejera de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, han sido un total de 4.863,99 hectáreas las que se han visto afectadas, de las que a El Paso corresponden 2.396,7 hectáreas, a Fuencaliente 1.621,22, de Villa de mazo 816,71 y en Llanos de Aridane 29,36 hectáreas.Tremendo: así ha asolado La Palma el #IFJedey. El 6,8% de la isla afectada #STOPincendios vía @112canarias pic.twitter.com/cNb4V3ya1W— WWF España (@WWFespana) 9 de agosto de 2016

Ahora, los 12 medios aéreos y 560 efectivos terrestres que se turnan en tierra (trabajan unos 300 al día) para sofocar las llamas esperan que el incendio no se desestabilice de nuevo hoy. De hecho continúa decretado el nivel-2 ya que no está extinguido y los termómetros pueden llegar hoy a los 40 grados. 6.516 horas de trabajo para combatir el fuego

Han sido siete días de intensa lucha sin descanso, en total más de 6.516 horas de lucha contra el fuego. Sólo los medios aéreos cesaban su trabajo por la noche por la falta de luz. Se calcula que han realizado más de 1.000 descargas en los distintos focos del fuego hasta conseguir domarlo. 

A estos datos hay que añadir el agente forestal fallecido y los 3.000 desalojados que ya han podido volver a sus casas. 

De momento se mantendrán los mismos efectivos que han participado hasta ahora en la lucha contra este incendio hasta que desaparezca el riesgo, después se estudiará la manera de replegar los efectivos, según ha comentado la responsable autonómica de Política Territorial. Ahora se trabaja para evitar riadas este invierno

El presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, reconoció hoy, por su parte, que en el trabajo realizado en las últimas horas ha habido "un poco de suerte", y deseó que la subida de las temperaturas "no" dé "ninguna sorpresa en los próximos días".

Además, confirmó que la Institución trabaja ya en evitar daños por posibles riadas, como las ocurridas en 2009-2010 después del incendio de 2009. "Aquello puso en peligro a muchísima gente. A ver si somos capaces de prevenir para afrontar un invierno seguro", zanjó. El peligro es la pérdida de masa forestal y con ella el freno para el agua torrencial en zonas tan escarpadas. 

El objetivo es proteger este espacio, declarado en 2002 Reserva de la Biosfera, como ejemplo de integración entre la población y la naturaleza.