Israel derriba un edificio con una mezquita en su interior en Jerusalén Este

Jerusalén, 26 mar.- Israel demolió hoy un edificio propiedad de un palestino que tenía en su interior un centro de atención médica, una mezquita y dos viviendas en un barrio de Jerusalén Este, informaron medios locales.

Según las fuentes, miembros de las fuerzas de seguridad israelíes y excavadoras llegaron a la zona de Abu-Dis, en Jerusalén, y procedieron a la demolición del inmueble, propiedad de Ghadeer Abu Ghaliyeh.

"Lo único que tengo que decir sobre el caso es que el edificio era ilegal bajo resolución judicial", alegó la portavoz del Ministerio del Interior israelí, Efrat Orbach, al ser consultada por Efe después de que la municipalidad de Jerusalén negara tener implicación alguna en el asunto.

"Generalmente las demoliciones en Jerusalén son municipales, pero en este caso no lo es, sino que la orden proviene del Ministerio del Interior, por lo que no disponemos de ninguna información", comunicó Evyatar Elad, portavoz del Ayuntamiento.

Por su parte, varios medios recogieron declaraciones de Abu Ghaliyeh en las que afirmaba que no recibió "ningún aviso previo" sobre la demolición del edificio, que aparentemente llevaba años construido, pero su propietario había efectuado una ampliación del mismo.

"He pasado 18 años intentando conseguir un permiso de construcción, pero las autoridades israelíes me lo han denegado constantemente", aseguró Abu Ghaliyeh.

Los barrios árabes de la ciudad hacen frente de manera frecuente a este tipo de órdenes de derribo, habitualmente por tratarse de construcciones ilegales que no cuentan con los permisos que la municipalidad debe otorgar, denegados, según algunas fuentes, en más de un 90 por ciento de los casos.

Un informe publicado por la ONG israelí Betselem afirma que desde 1967 la política de urbanismo en Jerusalén Este "está afectada por consideraciones políticas e infectada por una discriminación sistemática contra los palestinos que allí residen".

Por otro lado, según un informe difundido recientemente por la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), desde que se retomaron las negociaciones de paz con Israel en julio del pasado año, 146 viviendas han sido derribadas en Cisjordania y Jerusalén Este.

En febrero de este año, veinticinco organizaciones humanitarias internacionales que trabajan en la región denunciaron un fuerte incremento de las demoliciones de viviendas palestinas, que, de acuerdo con sus cifras, se ha duplicado, mientras que el de desplazados ha aumentado en un 75 por ciento desde julio en comparación con el año anterior.

Grupos palestinos también han denunciado que, desde que el diálogo comenzó a avanzar, Israel ha acelerado la demolición de aldeas en la zona con la intención no declarada de una futura anexión y crear así un nuevo hecho consumado en las negociaciones.