Italia aprueba rebaja de IRPF para quienes ganen menos de 24.000 euros al año

  • La reducción del impuesto sobre la renta del trabajo a quienes perciban menos de 24.000 euros anuales, impulsada por el Gobierno de Matteo Renzi, pasó hoy su último trámite parlamentario en la Cámara de los Diputados italiana.

Roma, 18 jun.- La reducción del impuesto sobre la renta del trabajo a quienes perciban menos de 24.000 euros anuales, impulsada por el Gobierno de Matteo Renzi, pasó hoy su último trámite parlamentario en la Cámara de los Diputados italiana.

Se trata de la reducción del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), lo que supondrá un incremento mensual en las nóminas de 80 euros.

Esta norma fue aprobada por 322 votos a favor, 149 en contra y 9 abstenciones, después de tres meses de trámite parlamentario y cinco día antes de que venciera el plazo para su aprobación, el 23 de junio.

De este modo, la cámara Baja convalidó este decreto que ya se puso en marcha por primera vez durante el pasado mes de mayo en Italia, cuando la reducción del IRPF apareció aplicada en las primeras nóminas.

Esta disminución de la presión fiscal sobre el trabajo, medida estrella del Ejecutivo Renzi, podría ser extensible a discapacitados y pensionistas tras la aprobación de los Presupuestos Generales del próximo ejercicio.

Además, la norma comprende una serie de medidas como la reducción del 10% del Impuesto Regional sobre la Actividad Productiva (IRAP).

El decreto correspondiente fue anunciado por el primer ministro el pasado 12 de marzo, dos semanas después de la investidura de su Ejecutivo, y supone una reducción de ingresos fiscales sobre las rentas del trabajo de en torno a 10.000 millones de euros para el Estado italiano.

Con esta medida, el Gobierno de Italia pretende fomentar el consumo interno del país.

El texto del decreto legislativo, como se denomina a la norma aprobada, incluye una serie de medidas de carácter recaudatorio y de limitación del gasto público con las que el Gobierno pretende cubrir los 10.000 millones de euros que dejará de ingresar en sus arcas públicas.

Algunas de las medidas afectan a los trámites burocráticos.

Por ejemplo, conseguir la ciudadanía italiana ahora costará 300 euros y la expedición del pasaporte será de 73,50 euros, además del precio del documento en sí.

Además, el texto prevé un incremento de los impuestos sobre las pensiones, que pasarán del 11 % al 11,5 %.

Otras medidas están destinadas a limitar el peso del estado y contener su gasto.

Con esta ley, el ente público televisivo italiano, la Rai, sufrirá un recorte en su dotación pública de 150 millones de euros.

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