"Hay una línea directa" entre el comando ruso y el estadounidense, señaló en un encuentro con la prensa el general de cuatro estrellas.
"Todo el mundo está interesado en la seguridad de los vuelos. Nadie quiere una situación peligrosa o una mala interpretación", añadió Carlisle.
Pese a ello, los rusos y estadounidenses no están compartiendo su plan diario de operaciones, explicó el general.
"En el actual estado de cosas, no vemos que haya oportunidad para coordinarnos o colaborar con los rusos en el combate contra (la organización yihadista) Estado Islámico, en particular porque Rusia parece mantenerse decidida a defender al actual régimen sirio".
Carlisle añadió que el envío de seis aviones F-15 C, que llegaron el viernes a la base aérea de Incirlik en Turquía, va a permitir mejorar la vigilancia del espacio aéreo sirio por parte de Estados Unidos.
El 20 de octubre, tres semanas después del comienzo de los bombardeos rusos en Siria, Moscú y Washington firmaron un protocolo para evitar incidentes aéreos entre las aeronaves de ambas fuerzas que operan en Siria.
lby/bdx/hov/yow
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios