Juez confirma el procesamiento de Pamies y Ballesteros por el chivatazo a ETA

Madrid, 2 nov.- El juez Pablo Ruz ha confirmado hoy el procesamiento del ex jefe superior de Policía del País Vasco Enrique Pamies y del inspector de la Brigada de Información de Álava José María Ballesteros por el "chivatazo" con el que se frustró una operación contra el aparato de extorsión de ETA en 2006.

El instructor del llamado "caso Faisán" ha adoptado esta decisión al desestimar los recursos de reforma interpuestos por Pamies y Ballesteros, así como los de la Asociación Víctimas del Terrorismo y Dignidad y Justicia, que pedían que también fuera procesado el ex director general de la Policía Víctor García Hidalgo.

A este respecto, Ruz destaca que ninguna de estas dos acusaciones han propuesto "la práctica de concretas diligencias" que pudieran corroborar la participación en estos hechos de García Hidalgo, "especialmente en lo atinente a los informes policiales de tráfico de llamadas" y a la compra de una tarjeta telefónica por parte del ex director general de la Policía.

Ruz procesó a los dos exaltos cargos policiales por los delitos de revelación de secretos y colaboración con banda armada porque en el procedimiento "aparecen motivos bastantes" para afirmarlo "con fundamento", mientras que consideró que "no ha lugar" a procesar a García Hidalgo.

En este nuevo auto, Ruz observa respecto a Pamies "la incongruencia de su planteamiento" por cuestionar que no se hayan practicado una serie de diligencias que ambos procesados reclamaron y que, al ser denegadas, en ningún momento optaron por recurrir esa decisión ante la Sala de lo Penal.

"Actitud de la que debe colegirse su anuencia en la falta de práctica de las diligencias" que han sido "sucesivamente propuestas" por estos procesados.

Según el auto de procesamiento, ahora ratificado, "los detalles del operativo policial que estaba preparándose en torno a la red de extorsión" de la banda "llegaron al conocimiento del jefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamies, a lo largo de la tarde y noche del 3 de mayo de 2006".

A raíz de conocer "todos los detalles" por parte de otros responsables policiales, Pamies contacta con Ballesteros para que al día siguiente se desplace a Irún "al objeto, presuntamente, de permitir el contacto con Joseba Elosua (dueño del bar Faisán) y poder trasladarle la información" sobre el operativo "con la intención de frustrar el mismo".