La acusación popular en Gürtel, a favor de la libertad vigilada para Correa

Madrid, 5 oct.- La acusación popular en el "caso Gürtel" está a favor de que el presunto cabecilla de la trama de corrupción, Francisco Correa, salga en libertad vigilada con medidas de control porque considera que lo importante no es mantenerle una elevada fianza, sino que el imputado vaya a juicio.

Así lo ha declarado hoy uno de los abogados de la acusación popular en el caso, Miguel Ángel Garrido, a la salida del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), donde esta mañana el juez instructor, Antonio Pedreira, ha seguido tomando declaración a alguno de los imputados.

Garrido, de la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE), ha recordado que fue en mayo de 2010 cuando esta asociación, que ejerce la acusación popular, solicitó a Pedreira esas medidas telemáticas al considerar que era factible que la Sala Civil y Penal del TSJM rebajara la cuantía de la fianza a Correa.

En su opinión, es más factible que Correa se pueda fugar del país si se le rebajaba la fianza que si se le imponía una libertad bajo medidas de vigilancia.

"Es absolutamente correcta" y "santificamos" la decisión de la Sala Civil y Penal del TSJM de anular la fianza de 15 millones de euros impuesta a Correa como condición para ser excarcelado y su sugerencia de dejarle en libertad con medidas de control electrónico, ha destacado el abogado.

Aunque "no haya forma humana de saber dónde están sus fondos", tenemos claro que Correa tiene derecho a acogerse a la presunción de inocencia y que el mero hecho de que alegue que no tiene capacidad económica no supone que no tenga derecho de disfrutar al menos de una libertad provisional.

"Las responsabilidades civiles ya se dirimirán en el momento oportuno, en el juicio", ha añadido.

Precisamente esta semana, el abogado de Correa, José Antonio Choclán, ha enviado un escrito a Pedreira recordándole que las medidas de vigilancia telemática se aplican a condenados por delitos más graves, y ha aportado como ejemplo una noticia aparecida el 11 de junio de 2011 en El Mundo, según la cual siete etarras fueron excarcelados para ser controlados únicamente por este dispositivo.