La Comisión Electoral de Fiyi tacha de "infundadas" las alegaciones de fraude

Cairns (Australia), 20 sep.- La Comisión Electoral de Fiyi calificó hoy de "infundadas" las alegaciones de fraude y arremetió contra la oposición por realizar las acusaciones, informó hoy el diario "Fiji Times".

Las "alegaciones infundadas han causado daño a la reputación de la oficina de la Comisión Electoral y empañado el espíritu de miles de trabajadores cuya dedicación y compromiso permitió que se celebraran estos comicios", dijo Chen Bunn Young, presidente del organismo.

Está previsto que mañana se anuncien los resultados finales de las elecciones celebradas el pasado miércoles.

Ayer, la comisión excluyó temporalmente 36 urnas electorales del recuento de papeletas para investigar las alegaciones de irregularidades y fraude electoral de la oposición.

Cinco partidos solicitaron a la Comisión Electoral que suspendiera el escrutinio de los votos a causa de las supuestas irregularidades.

Entre ellos, se encontraban el Partido Laborista de Fiyi, el Partido Una Fiyi, el Partido Liberal, Demócrata y Social (SODELPA), el Partido de la Federación Nacional y el Partido Demócrata Popular.

Los datos provisionales del escrutinio otorgan la victoria con alrededor el 60 por ciento a la formación Fiyi Primero, del actual primer ministro, el contraalmirante Frank Bainimarama, quien gobierna el país desde el golpe militar que comandó en 2006.

SODELPA aparece en segundo lugar, con el 26,70 por ciento, y después Partido de la Federación Nacional, con el 5,60 por ciento.

Un total de 527.000 electores estaban convocado a estos comicios para elegir los 50 escaños del Parlamento y la participación superó el 75 por ciento, de acuerdo con la Comisión Electoral.

Fiyi, una nación del Pacífico Sur con cerca de 900.000 habitantes, ha vivido tres golpes de Estado y una intentona desde la independencia, en 1970, debido a que parte de la comunidad de origen fiyiano, representada por SODELPA, quiere conservar los privilegios que ha disfrutado históricamente.

Otros, como Fiyi Primero, defienden que en una democracia moderna todos son iguales ante el Estado.