Barcelona, 28 sep.- El PSC ha anunciado hoy que su comisión Ejecutiva ha decidido por primera vez no proponer a ningún candidato a liderar el cartel de las autonómicas, por considerar que lo más democrático es que quienes deseen serlo se presenten a votación en el consejo nacional del domingo.
Así lo ha avanzado en rueda de prensa el secretario de organización del PSC, Dani Fernández, tras la reunión de la dirección de los socialistas catalanes, en la que han tomado esta decisión inédita, ya que es la primera ocasión en la que la ejecutiva no propone a ningún candidato.
El PSC ha decidido además rebajar el número de avales necesarios del 15 % que establecen los estatutos al 10 % para facilitar que todos los candidatos que deseen presentarse puedan hacerlo, de manera que será suficiente contar con la firma de 43 de los 430 miembros del consejo nacional.
Los socialistas catalanes han descartado tanto hacer unas primarias abiertas a la ciudadanía como unas reducidas a los militantes por no tener margen de tiempo para organizar de manera adecuada estos procesos ante el adelanto electoral.
El primer secretario del PSC, Pere Navarro, anunciará esta tarde en Terrassa (Barcelona) que se presentará para liderar el cartel del partido en las próximas elecciones catalanas del 25 de noviembre, mientras que aún queda en el aire si la exconsellera Montserrat Tura se presentará finalmente como ha anunciado en los últimos días.
En la rueda de prensa de hoy, Fernández, que será el jefe de campaña del PSC, ha lanzado un mensaje de optimismo a sus filas al asegurar que las elecciones "están absolutamente abiertas": "Son las más abiertas de la democracia, quien piense que la foto final será igual que la inicial, se equivoca", ha subrayado.
"No aceptaremos que nos coloquen donde no estamos. Estas elecciones son una gran oportunidad para el PSC, para defender nuestro modelo federalista frente a los que quieren recentralizar, eliminar o petrificar las autonomías y frente a los que quieren la ruptura con España", ha señalado.
Conscientes de que las elecciones girarán en torno al debate sobre una hipotética independencia de Cataluña, el PSC se erigirá como la tercera vía, entre el autonomismo y la secesión, pero no dejará de lado su discurso social y de propuestas para salir de la crisis.
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