Madrid, 29 nov.- La FEMP pedirá al nuevo Gobierno un aplazamiento, de los cinco años previstos a diez, de la devolución de la liquidación de las cuentas de 2008 y 2009, como medida extraordinaria para paliar la situación de "asfixia económica" que tienen los ayuntamientos.
Estas cantidades ascienden a 5.896 millones de euros en total y, si los plazos empiezan a correr, los Ayuntamientos deberían abonar a la Administración central más de 1.200 millones a partir de 2012, mientras que, si se aplaza, comenzarían a pagar unos 600 a partir de ese año.
La FEMP ha celebrado hoy su primera Junta de Gobierno tras la reelección de cargos después de la X Asamblea de esta Federación, celebrada el pasado mes de septiembre, porque querían respetar "el período de actividad electoral, ha dicho su presidente, Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla.
En rueda de prensa, Zoido ha destacado que todos los acuerdos se han tomado por unanimidad y se ha felicitado por el consenso alcanzado para formar y presidir las Comisiones que emanan de la Junta de Gobierno.
Ha precisado que, a pesar de contar el PP con mayoría absoluta, ha cedido la representación de siete de esas Comisiones a otros tantos representantes de otras formaciones políticas.
Ha anunciado que pedirán al próximo Gobierno la convocatoria del pleno de la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL) para tratar sobre "la grave situación económica" que padecen las corporaciones locales y ha apelado a la unión de la FEMP para defender los intereses del municipalismo.
Zoido ha precisado que la crisis económica ha puesto de manifiesto las dificultades del conjunto de las administraciones, aunque ha insistido en que la situación es aún peor en las municipales, debido a que "los ingresos se han hundido" y apenas hay actividad económica, además de que se ha incrementado el gasto social.
Todo ello, ha continuado, pone en riesgo la estabilidad de los gobiernos locales, que están haciendo un "gran esfuerzo económico".
Además del aplazamiento de la deuda que tienen con la Administración central, quieren tratar con el próximo Ejecutivo la definición del marco competencial y un nuevo modelo de financiación para ejercer esas competencias y están dispuestos a debatir sobre una reestructuración del sector público municipal.
Zoido ha declinado precisar a cuántas personas y a qué tipo de organismos podría afectar y ha insistido en que esa "simplificación" se hará con diálogo y fomentando la cooperación municipal.
Ha puesto como ejemplo las mancomunidades o el trabajo que hacen las Diputaciones en los municipios pequeños, al tiempo que se ha mostrado partidario de la colaboración para la recogida de basuras y residuos sólidos, el tratamiento de aguas o la extinción de incendios entre varios municipios.
Preguntado por si los Ayuntamientos van a cumplir con la ley de morosidad, se ha mostrado a favor, porque es "lamentable" que estén en riesgos pequeñas empresas y autónomos por el impago de las administraciones, pero ha agregado que "es muy difícil" pagar ahora para las corporaciones locales.
Zoido, que ha insistido en el rigor y la transparencia cuando se está al frente de un cargo, ha coincidido con el presidente del PP de Andalucía, Javier Arenas, en que deberían eliminarse las tarjetas de crédito de todas las instituciones.
"Cada uno que se pague lo suyo -ha agregado- y luego, si es necesario, se le reembolsa".
Respecto a la situación de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, que tuvo que suspender el pasado sábado su asamblea general para renovar los cargos por la falta de acuerdo entre los partidos, el también alcalde de Sevilla ha pedido al PSOE que reconozca que en Andalucía ganó el PP y ha lamentado la situación, por lo que les ha pedido que rectifiquen. EFE
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