La Fiscalía investiga una denuncia de un pequeño accionista de L'Oréal

París.- La Fiscalía de París anunció hoy la apertura de una investigación sobre la denuncia presentada por un pequeño accionista de L'Oréal ante la sospecha de que el fotógrafo François-Marie Banier se benefició de un contrato con esa empresa de cuatro millones de euros injustificados

La demanda, presentada el pasado día 5 "contra X" -sin especificar un presunto responsable-, es por malversación, difusión de informaciones falsas o engañosas, falsificación, complicidad y receptación, precisó el abogado Frédérik-Karel Canoy, que representa al pequeño accionista.

Según las informaciones divulgadas por "RTL" y "Marianne", el contrato de Banier, concertado en 2002 por una duración de diez años, establecía una remuneración de 405.000 euros anuales por asesoramiento en cuestiones de moda y arte.

Para el denunciante, se trata de un monto desorbitado para la contraprestación y, por ello, contrario a los intereses de la empresa.

L'Oréal confirmó la existencia de un contrato con Banier y, sin dar detalles sobre la investigación judicial amparándose en el secreto del sumario, subrayó que esa relación contractual termina a finales de 2011.

Banier está acusado también por Françoise Meyers-Bettencourt, hija de la heredera de L'Oréal, de abusar de la debilidad de su madre Liliane, de 87 años, quien le habría hecho donaciones por unos 1.000 millones de euros.

La pasada semana el fotógrafo fue interrogado bajo arresto durante 36 horas junto a otros tres colaboradores de Liliane Bettencourt: el gestor de la fortuna de la multimillonaria, Patrice de Maistre, su ex abogado, Fabrice Goguel, y el español Carlos Vejarano, gestor de una isla en las Seychelles que los Bettencourt habían comprado en 1998 y cuya propiedad aparece ahora oscura.

Los interrogatorios de la policía estaban destinados a aclarar las sospechas de blanqueo y fraude fiscal que pesan sobre todos ellos, después de que en las últimas semanas hubiera un goteo de revelaciones sobre diversas operaciones dudosas de Bettencourt.