Madrid, 11 nov.- La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha mantenido hoy su petición de dos años de cárcel con la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas para Oier González Bilbatua, al que acusa de haber pertenecido en 1998 a un grupo dedicado a la violencia callejera.
En el juicio, que ha quedado visto para sentencia, el Ministerio Público ha sostenido que "son demasiados los indicios" para condenar al acusado por un delito de tenencia de sustancias inflamables e incendiarias y ha defendido la validez de las declaraciones policiales tanto de Oier González como de uno de sus supuestos compañeros de grupo, Urko Mancisidor Torrontegi.
El procesado, que ha negado los hechos, ha indicado que conocía a los demás miembros del supuesto grupo de "kale borroka" porque eran amigos suyos y ha insistido en que las declaraciones policiales en las que admitía su participación en actos de violencia callejera fueron hechas bajo presiones.
La defensa de González, que ha solicitado su libre absolución, ha insistido en la falta de pruebas "directas" o "indirectas" contra su patrocinado, y se ha remitido a la jurisprudencia para defender que las declaraciones durante la incomunicación tienen que estar ratificadas por "elementos externos".
Por su parte, uno de los miembros de la Ertzaintza que investigaron a este grupo de violencia callejera ha contado que el nombre de González apareció en las declaraciones policiales de uno de sus supuestos compañeros, que le implicó en los ataques a dos bancos y una oficina de seguros el 10 de enero de 1998.
Además, el ertzaina ha indicado que encontraron los líquidos que este grupo empleaba para hacer artefactos explosivos en un caserío de Amorebieta (Vizcaya).
Respecto a estas sustancias, un perito ha indicado que en algunos casos había una "mezcla de gasolina o de líquido inflamable con ácido sulfúrico" ya preparada para ser utilizada para ataques de violencia callejera, mientras que, en otros, los líquidos se almacenaban de forma independiente.
Asimismo, otro agente ha declarado que se encontraron más sustancias para hacer artefactos explosivos en una "herriko taberna" de Mundaka, en la misma provincia.
Oier González fue detenido en la localidad francesa de Grenoble en julio de 2005, cuando se disponía a sustraer un vehículo junto a otro miembro de ETA, y después de cumplir en ese país condena por asociación de malhechores fue entregado a España el pasado 28 de abril. EFE
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