Lleida.- La Guardia Civil de la aduana leridana de La Farga de Moles ha decomisado este fin de semana 648 cajetillas de tabaco de contrabando en seis actuaciones distintas, dos de ellas en conductores que llevaban adosada la mercancía al cuerpo mediante cinta adhesiva.
Además de las cajetillas, los agentes han incautado cerca de un kilo de picadura de tabaco, todo ello valorado en 2.450 euros, según ha informado hoy el instituto armado.
El material aprehendido se hallaba escondido en distintas partes de los vehículos inspeccionados, aunque dos de los infractores, dos hombres rumanos que viajaban en un autobús de línea regular Andorra-La Seu d'Urgell, llevaban cerca de 160 cajetillas de tabaco adheridas a su cuerpo con cinta.
En los otros casos, las cajetillas de tabaco estaban ocultas en espacios como el maletero de un coche, el hueco de la rueda de repuesto, bajo los protectores de plástico que rodean las ruedas de o en las cavidades que hay junto al motor.
Cuatro de las actuaciones se llevaron a cabo el sábado día 6, mientras que ayer domingo que realizaron otros dos decomisos por valor de unos 1.000 euros.
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