La Junta confía en que la condena a la madre que pegó a la maestra sirva de ejemplo

Sevilla.- El consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, confía en el "efecto inhibidor" de la sentencia por la que un juzgado granadino ha condenado a una pena de tres años de prisión a la madre de un alumno de un colegio de Fuente Vaqueros por agredir a la maestra de su hijo.

En declaraciones a los periodistas en el Parlamento andaluz, el consejero ha expresado su deseo de que a partir de esta sentencia "muchos adultos se planteen que una condena de esta naturaleza puede ser extraordinariamente dura, como duro también es sufrir una agresión en el ejercicio de una profesión tan noble y ejemplar como es la de ser maestro".

De la Chica ha opinado que la sentencia del Juzgado de lo Penal 1 de Granada es "la más concluyente y dura de España hasta el momento" y ha señalado que la agresión de la madre fue "un hecho de extraordinaria gravedad".

"Se demuestra que, con la ley en la mano y las leyes vigentes, es posible sancionar de forma severa una conducta tan reprobable como ésta", ha insistido, al tiempo que ha expuesto que si hay padres que tienen comportamientos inadecuados de esta naturaleza "deben ser sancionados con la máxima dureza".

La sentencia, según De la Chica, se debe, "en buena medida", al trabajo conjunto que la Consejería de Educación está realizando con la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y al protocolo que ambas instituciones firmaron el pasado verano para que las agresiones a docentes se tipificaran como atentado a la autoridad pública.

El juzgado granadino ha condenado a tres años de prisión por un delito de atentado a la madre de un alumno de 5 años que agredió a la maestra de su hijo tras enterarse de que el menor no había podido comerse su bocadillo durante el recreo.

En el fallo, al que hoy ha tenido hoy acceso Efe, el Juzgado de lo Penal 1 de Granada impone además a la agresora, Estefanía C.F., de 23 años, que ya fue condenada por otro delito de atentado, el pago de una multa por una falta de lesiones y que indemnice a la víctima en 300 euros.