La región Lombardía renueva su Gobierno tras escándalo por contacto con mafia

Roma, 22 oct.- El presidente de la región italiana de Lombardía, Roberto Formigoni, anunció hoy la composición de su nueva junta de Gobierno con un número reducido de miembros, tras la disolución del Ejecutivo regional a raíz del arresto de uno de sus consejeros por contactos con la mafia.

La nueva junta de Lombardía, una de las regiones más industrializadas y ricas de Italia, cuya capital es Milán, contará con una mayoría de miembros de perfil técnico, mientras se espera la convocatoria de nuevas elecciones.

Lombardía vive un momento de creciente tensión entre la formación Pueblo de la Libertad (PDL), del ex primer ministro Silvio Berlusconi y a la que pertenece Formigoni, y sus aliados en el Gobierno regional, el partido federalista Liga Norte, que ahora deberán fijar nuevas estrategias y equilibrios, algo que en el ámbito nacional ya se rompieron el pasado otoño.

En los últimos meses la Liga Norte también se ha visto salpicada en su seno por escándalos de corrupción que llevaron a la dimisión del que fuera su fundador, Umberto Bossi, como secretario general y que han llevado a su sucesor en el cargo, Roberto Maroni, a emprender una amplia campaña de "limpieza" con el fin de recuperar la confianza de sus votantes.

En esta línea Maroni subrayó en los últimos días que iba a "hacer limpieza" en Lombardía igual que ya lo había hecho en la Liga, en alusión a las dimisiones de Bossi y personas cercanas al líder liguista salpicadas por el escándalo, entre ellas su hijo Renzo, que formaba parte del Consejo regional.

La decisión de disolver la junta regional lombarda fue anunciada el pasado 11 de octubre por el propio Formigoni tras el arresto de su consejero Domenico Zambetti, acusado de pagar a los clanes afincados en Milán de la 'Ndrangheta, la mafia calabresa, a cambio de la compra de votos en los comicios regionales de 2010 con el fin de garantizar su elección.

Después de que estallara el escándalo de Zambetti, Formigoni se vio obligado a tomar una decisión para mostrar una señal de discontinuidad en el ámbito político, e incluso se barajó la posibilidad de que presentara su dimisión.

Sin embargo Formigoni, que con el actual suma su cuarto mandato al frente del Gobierno regional de Lombardía, descartó que fuera a abandonar el cargo, subrayando que lo sucedido es grave pero atañe a uno de sus consejeros y no a él.

La incógnita se centra ahora en ver cuándo se celebrarán las elecciones para elegir el nuevo Gobierno de la región, ya que en los últimos días se han multiplicado las acusaciones cruzadas y desmentidos entre Formigoni y Maroni.

Mientras Formigoni habría apuntado plazos breves tras señalar su intención de que el consejo regional acometa de forma inmediata un cambio en la ley electoral para posteriormente disolverlo y convocar elecciones incluso antes de Navidad, Maroni ha señalado que los comicios regionales deberían coincidir con la fecha de las elecciones generales en la primavera de 2013.